Proponen reducir la condena a un violador: Justicia polémica
Fabricio Álvarez Albarracín fue condenado a 50 años de prisión por delitos aberrantes, pero los jueces quieren bajarle la pena.
Para analizar esta polémica "Chiche en Vivo" reunió a doctora Deborah Huczek, abogada de una de las víctimas, y los doctores Fernando Soto y Roberto Carles, que además es Coordinador de la Comisión para la reforma del Código Penal.
¿Cómo se llegó a la condena de 50 años?
Huczek: "Gracias al trabajo que se hizo en la etapa oral, se obtuvo la sentencia de 50 años. Él tenía una condena anterior, que después fue unificada con otra, por distintos delitos, entre ellos abuso sexual. Tenía 4 años y medio de condena unificada, y luego le dieron la libertad condicional y allí cuando cometió las nuevas violaciones".
"Se llegó a la sumatoria de 50 años porque se tomaron las penas máximas, que llegó a 130 años, y se redujo a 50 años por el Código Penal. Por cada víctima él cometió entre dos y cuatro delitos".
¿Qué pasará con la reducción de la pena?
Huczek: "La verdad que las víctimas y los abogados consideramos que inhumano es el trato que ellas sufrieron y que fueron condenadas de por vida por lo que les hizo Álvarez. Es un cambio importante 50 años contra 37, porque primero todo queda a criterio de los jueces, y nunca sabemos lo que va a pasar".
Soto: "Estos hechos son gravísimos, terribles, entonces si tiene la posibilidad de salir a los 80 años, tiene que salir en ese momento, y sino debería ser perpetua. Lo cierto es que la cárcel en la Argentina no puede resocializar a nadie".
¿Cómo se modificaría la situación de Álvarez Albarracín con el nuevo Código Penal?
Huczek: "Las víctimas tienen mucho temor a este nuevo código porque la ley penal es retroactiva, y si esta persona es beneficiado con una libertad condicional va a ir a buscar a las víctimas. Con esta nueva ley penal este sujeto podría salir en 15 años. El panorama es absolutamente desalentador".
Carles: "Hemos tenido interpretaciones de penas de hasta 70 años, y no puede ser que en un mismo país haya diversas penas. Esto pasa porque en la Argentina no se sabe cuál es el máximo de la pena privativa de la libertad. Según quién interpreta el Código Penal, pueden pensar que es 25, 37 o 50 años".
"El nuevo Código fija el máximo de 30 años porque es lo que se considera por los delitos de genocidio. En nuestro orden constitucional no podemos admitir la pena perpetua porque la constitución admite la resocialización del delincuente. La perpetua significaría que el recluso debería salir de la cárcel con los pies hacia adelante".
Reforma del Código Penal: ¿sí o no?
Carles: "Nada le va a impedir al juez tener en cuenta los antecedentes, porque de hecho se va a mantener el registro de reincidencia. El anteproyecto que nosotros hemos presentado tiene algunos agravantes que hoy no existen, como la indefensión de la víctima".
"Es cierto que con el nuevo Código un delincuente puede ser liberado en los dos tercios de la pena, pero si se habla de un hecho cruel no recibe este beneficio. Además, para obtener la libertad tiene que tener una evaluación por varias instituciones y no solo por el servicio penitenciario. Este régimen es absolutamente más severo que el anterior, porque se prevé en el sistema que haya un dictamen favorable del Ministerio Público más la consideración de tres peritos".
Soto: "En el nuevo Código, se lo condena a 30 años y en los dos tercios de la pena puede ser liberado, a los 20 años. Incluso, con esta nueva norma el juez puede establecer que se baje el mínimo de la pena".
"Los que están condenados a perpetua tienen que salir si se aplica este nuevo Código. De hecho podría salir Robledo Puch. Es cierto que nadie cumple condena perpetua en la Argentina hoy salvo Robledo Puch. Con este Código que está reformado con la ley Blumberg este tipo de delitos graves podrían obtener la libertad condicional, que con la actual norma no sucede".