¿Por qué no se puede tener barba en las cárceles de Estados Unidos?
Los establecimientos carcelarios del país del norte son muy estrictos en este aspecto. El conflicto con el Estado Islámico, encarnado en una medida.
Las regalas en las cárceles de Estados Unidos son muy variables según el estado en que estén ubicadas. Sin embargo, la portación se barba se ha convertido en un tema controversial, ya que en la mayoría de los establecimientos carcelarios está prohibido mantener este aspecto. Especialmente en las cárceles del sur, el control es extremadamente estricto: sólo aquellos que padecen de problemas cutáneos puede tener medio centímetro de vello un bigote "bien prolijo". ¿Por qué se da este tipo de restricción? Los especialistas apuntan a una cuestión religiosa.
Gregory Holt, un hombre encarcelado en la prisión de Arkansas explica que la imposibilidad de portar barba atenta contra su libertad religiosa. Este detalle cobra sentido al conocer que el hombre decidió transformarse al islamismo, razón por la que adoptó el nombre de Abdul Malik Muhammad. Este prisionero logró que el tema llegara a la Corte Suprema de los Estados Unidos, que podría sentar los precedentes del caso, según la revista New York Times.
Muhammad decidió iniciar una denuncia porque deseaba dejar crecer su barba durante un mes, pero las reglas de la prisión no se lo permitían. Según su opinión, esta restricción atenta contra su derecho a de practicar libremente su religión: el islam.
Las autoridades del establecimiento carcelario, por su parte, aseguran que esta media sobre el aseo personal se relaciona con una prevención: la de evitar que los prisioneros escondan diversos elementos entre los vellos faciales, como hojas de afeitar, tarjetas SIM, drogas y otros elementos. Además, la barba crecida ayuda a cambiar de apariencia al encarcelado. En caso de fuga, este hecho tiene una importancia fundamental.
Sin embargo, investigaciones llevadas a cabo para comprobar estas prácticas han determinado que son muy poco frecuentes; de hecho, casi no existen casos que demuestren la efectividad de este control. Según el portal Le Monde, Muhammad es defendido ante la Justicia por un profesor de Yale, que lucha por la defensa de los derechos religiosos. De ganar, se podría establecer una ley general en el país en beneficio de los musulmanes que allí habitan. La controversia se agita por la situación bélica que involucra a los Estados Unidos y el Mundo Árabe, que alarma a la población mundial por su terrible escalada de violencia.