¿Por qué gusta tanto "Peligro, sin codificar"?
¿A ustedes les gusta? En el foro de comentarios pueden explayarse. En tiempos sin Tinelli, la estructura del humor en televisión es contar chistes, pero de otra forma.
Por Rodrigo Lussich
@rodrigolussich
Por Adrián Pallares
@adrianpalla
Está en un gran momento "Peligro, sin codificar", un programa que tuvo su audiencia "de culto" en América y que -al pasar a Telefe- se masivizó considerablemente. Seguramente con una gran audiencia masculina y de mucha gente joven, los pibes replican lo que allí sucede y contagian el fenómeno. Rescatando el espíritu del "viejo Videomatch", con sus propios humoristas de antaño que alguna vez fueron dejados de lado por el efecto "Bailando por un sueño"; allí están Pachu, Diego Korol, Yayo, Pichu, Campi y un sin fin de integrantes.
Los Rebo son una gran creación que se disfruta, y el gran hallazgo del programa parece ser el de varios muchachones grandes contando chistes. Nada nuevo; pero como siempre decimos, el cómo es la fórmula del éxito.
Cual barra de amigotes de joda por las noches, allí van desfilando en locas secciones, imitaciones, chistes, momentos de lo más bizarros e invitados de insólita procedencia. Martín Campi es una de las más festejadas adquisiciones: rápido de reflejos, busca que la actualidad repercuta desde el humor más hilarante en el programa de la noche. Su caracterización de "el bebe de Canosa" fue desopilante.
Tinelli quería volver a ese canal (Telefe) este año con la estructura de su Videomatch original. No fue posible -especulaciones sobran al respecto- pero allí estaban listos los muchachos de "Sin codificar" para quedarse con ese "nicho" de público ávido de carcajadas.
@rodrigolussich
Por Adrián Pallares
@adrianpalla
Está en un gran momento "Peligro, sin codificar", un programa que tuvo su audiencia "de culto" en América y que -al pasar a Telefe- se masivizó considerablemente. Seguramente con una gran audiencia masculina y de mucha gente joven, los pibes replican lo que allí sucede y contagian el fenómeno. Rescatando el espíritu del "viejo Videomatch", con sus propios humoristas de antaño que alguna vez fueron dejados de lado por el efecto "Bailando por un sueño"; allí están Pachu, Diego Korol, Yayo, Pichu, Campi y un sin fin de integrantes.
Los Rebo son una gran creación que se disfruta, y el gran hallazgo del programa parece ser el de varios muchachones grandes contando chistes. Nada nuevo; pero como siempre decimos, el cómo es la fórmula del éxito.
Cual barra de amigotes de joda por las noches, allí van desfilando en locas secciones, imitaciones, chistes, momentos de lo más bizarros e invitados de insólita procedencia. Martín Campi es una de las más festejadas adquisiciones: rápido de reflejos, busca que la actualidad repercuta desde el humor más hilarante en el programa de la noche. Su caracterización de "el bebe de Canosa" fue desopilante.
Tinelli quería volver a ese canal (Telefe) este año con la estructura de su Videomatch original. No fue posible -especulaciones sobran al respecto- pero allí estaban listos los muchachos de "Sin codificar" para quedarse con ese "nicho" de público ávido de carcajadas.