Policía conquistó bastión de narcotraficantes en favelas de Rio de Janeiro
Centenares de policías apoyados por el Ejército y helicópteros artillados tomaron el control este domingo de un enorme conjunto de favelas al norte de Rio de Janeiro, bastión de la principal organización delictiva de la ciudad que albergará los Juegos Olímpicos 2016.
Un helicóptero de la Policía Militar en vuelo rasante en una de las entradas de la favela da Grota, una de las 15 que componen el Complexo do Alemao invadido por la policía, marcó el comienzo de este operativo sin precedentes en esta ciudad que será subsede del Mundial de Fútbol de 2014, y que es conocida tanto por su belleza como por su violencia endémica.
Aproximadamente dos horas después de iniciadas las acciones, la Policía Militar anunciaba que el Complexo do Alemao, en cuya área habitan unas 400.000 personas, estaba bajo control de las autoridades.
"Tomamos todos los puntos a los que debíamos llegar. Todos fueron alcanzados por los batallones", anunció el comandante de la Policía Militar (PM), Mario Sergio Duarte.
La policía recibió un evidente apoyo de la población, que desde las ventanas de sus casas pedía "paz" con carteles caseros y pañuelos blancos.
Las autoridades señalaron que la resistencia opuesta por los delincuentes fue menor, luego de horas de tensión desde que el jueves unos 500 traficantes se atrincheraron en las favelas del Complexo do Alemao y mantuvieron intensos intercambios de disparos con la policía.
"No tuvimos tanta dificultad (sobre todo) porque las aeronaves de la Policía Civil hicieron vuelos rasantes con apoyo de fuego", dijo Duarte.
Los efectivos que ingresaron al Complexo tuvieron asimismo apoyo de francotiradores. El perímetro fue asegurado por el Ejército, que proveyó 800 efectivos y decenas de vehículos blindados para la operación, que contó con la participación de 2.600 hombres, según fuentes policiales.
El portavoz de la Policía Militar, coronel Lima Castro, dijo a la prensa que las próximas horas serán sobre todo para "peinar" la zona con el fin de "encontrar heridos, drogas y armamento", ya que "el área es muy grande" y hay "informaciones de que (traficantes) aún están escondidos".
El vocero fue enfático en señalar que no dispone de números sobre la cantidad de detenciones realizadas, o sobre traficantes que hubieran podido huir del lugar a pesar del cerco policial, extremo que es reconocido por la policía.
Entre algunas decenas de detenciones que fueron registradas por los periodistas destaca la del prófugo Elizeu Felicio de Souza, "o Zeu", uno de los narcos condenados por el brutal asesinato del periodista Tim Lopes en 2002.
Una portavoz de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado de Rio de Janeiro dijo que el volumen de droga confiscado por las autoridades, sólo en el caso de la marihuana que era distribuida desde el 'Alemao', alcanza las 40 toneladas.
"Sólo la Policía Militar confiscó 20 toneladas. El resto fue de la Policía Civil" y las demás ramas de las fuerzas del orden que participaron de la toma, indicó.
Sólo en la favela da Grota, una de las 15 que componen el Complexo do Alemao, podía verse al anochecer una interminable cadena humana formada por policías que se pasaban los paquetes de marihuana de mano en mano para poder sacarlos desde lo alto del cerro en el que se ubica el barrio, hasta camiones y camionetas dispuestos para carga, constató un periodista.
El médico de Bomberos que coordinó las operaciones sanitarias, el mayor Edson Gonçalves, señaló que "no hubo heridos". La portavoz de Seguridad Pública confirmó que no tienen registro de fallecidos en el operativo.
La policía buscaba acabar con el control que la organización delictiva Comando Vermelho (Comando Rojo) mantenía desde hacía más de dos décadas sobre este conjunto habitacional, uno de los dos bastiones del narcotráfico en Rio de Janeiro junto con la Rocinha, la favela más grande de la ciudad.
A pesar de un ultimátum dado por la policía el sábado para que se rindieran, los delincuentes optaron por permanecer en el lugar.
La invasión fue el punto culminante de una ofensiva desatada en la última semana tras una ola de ataques a puestos policiales e incendios de vehículos a manos de narcotraficantes, con un saldo de 35 muertos.
"Esta conquista es un paso decisivo para nuestra política de seguridad pública", subrayó el gobernador Sergio Cabral a la TV Globo
Las autoridades prometieron continuar la ofensiva contra el narcotráfico.
"Si llegamos al (Complexo do) Alemao, vamos a ir a la Rocinha y a Vidigal", ambas favelas reductos del tráfico de drogas, en la zona sur de la ciudad, afirmó el secretario de Seguridad José Beltrame.