Polémica por el nuevo Código Penal: ¿es abolicionista?
Mientras desde el Gobierno Nacional se propone una reforma de las normas penales, muchos abogados y especialistas cuestionan esta modificación.
Desde el Gobierno Nacional se impulsa una amplia reforma del Código Penal, con el aval del miembro de la Corte Suprema de Justicia, Raúl Zaffaroni, la modificación ha creado una gran polémica dentro del ámbito académico y los profesionales sobre los cambios que se quieren introducir.
En ese sentido, el ex juez y abogado penalista Eduardo Gerome analizó en "Hola Chiche" los aspectos más controversiales de la reforma.
¿Por qué la reforma es polémica?
"Yo me pregunto si se necesita una reforma del Código Penal. Nuestro Código tiene 90 años, y aunque tuvo muchas reformas, dicen que tiene disparidad en las penas, por eso también me cuestiono si es necesario andar en ese camino de reformar el Código cuando parecería que estamos yendo en contra de lo que la gente estima".
"Más allá de ir a un abolicionismo, en esta reforma hay algunas personas que evidentemente han sido preponderantes en la mayor parte de la redacción de los artículos, como Zaffaroni".
¿Cuáles son las modificaciones más controversiales?
"Se considera que un menor de 21 años, ya por ser menor de esa edad, es un atenuante. Cuando vemos que en los menores de 21 se registran los delitos más graves, que sea un atenuante me parece un despropósito. Se puede tomar atenuante de un menor, pero en líneas generales es un error".
"En otros puntos, se atenúa un delito porque se deja a arbitro de los jueces las circunstancias personales y sociales, o incluso no considerar la reincidencia, y eso es una desigualdad ante la ley, porque si van a juzgar a una persona con diversos delitos por una persona que delinque por primera vez es una desigualdad. Se lo presenta como algo no discriminativo y es un disparate".
"Si hay un ladrón que está asaltando a alguien y entonces ese asaltado se defiende y por ahí le causa una lesión al ladrón, esa lesión puede ser considerada como un atenuante de la pena para el delincuente".
"También se plantea mucho la existencia de penas alternativas, que es muy lindo para un país adelantado, porque en esos lugares se vigila el cumplimiento, que no es el caso nuestro".
"Con esa tesitura, muchos aspectos de esta reforma, sin analizarlo ahora en detenimiento, van en contra de la realidad social de nuestro país y de un sistema en el que, aunque no creo que las penas tengan que ser elevadas, tienen que ser justas y ser cumplidas".
"Si la gente ve que los delincuentes entran y salen de la comisaría no hay temor por la sanción".
¿Puede prosperar la reforma?
"Yo espero que más allá de estas cuestiones ideológicas se abra un debate para que los organismos, las instituciones, las asociaciones y los ciudadanos puedan opinar sobre este tema y que esa opinión sea escuchada".