Polémica modalidad para fiestas infantiles: salones-campo de tiro
Lejos de los tradicionales juegos inocentes, los niños de Lewisville, Texas, pueden celebrar sus cumpleaños con armas, cartuchos y una diana.
En el país donde la violencia con armas de fuego sobrepasa los 338 mil casos por año y ya es considerada por expertos en salud pública como una enfermedad social, una nueva práctica se impone en la fiestas infantiles: salones que simulan campos de tiro.
Lejos de los tradicionales juegos inocentes, los niños de Lewisville, Texas, pueden celebrar sus cumpleaños con armas, cartuchos y una diana, informó Yahoo News.
Se trata del Eagle Gun Range, un salón de fiestas y campo de tiro para que los niños festejen en un marco de violencia "controlada".
"La edad mínima son 8 años. Se necesita estar lo suficientemente alto para quedar por encima de la mesa de tiro", cuenta su creador, David Prince.
Ante la polémica que genera la modalidad, su dueño asegura que "nadie está desatendido", y añade: "Los padres son asesorados uno por uno para que la experiencia con su hijo sea segura".
Las opiniones entre los vecinos adultos del campito están divididas: muchos están encantados con la idea que, en muchos casos, refleja sus propios hobbies; otros se oponen rotundamente a que sus hijos manejen armas de fuego y aseguran que a los ocho años los niños no pueden diferenciar el juego de la realidad.
Recordemos que en Estados Unidos entre 260 y 300 millones de armas de fuego están en manos de civiles, es decir, cerca de un tercio de los hogares cuenta con una.
Por esto, no es casualidad la gran cantidad de tiroteos públicos y accidentes con armas que vivió y vive el país: sólo durante el año pasado, fueron atendidos más de 73 mil pacientes en salas de urgencia por causa de lesiones con arma de fuego, según un cálculo de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos CDC.
Lejos de los tradicionales juegos inocentes, los niños de Lewisville, Texas, pueden celebrar sus cumpleaños con armas, cartuchos y una diana, informó Yahoo News.
Se trata del Eagle Gun Range, un salón de fiestas y campo de tiro para que los niños festejen en un marco de violencia "controlada".
"La edad mínima son 8 años. Se necesita estar lo suficientemente alto para quedar por encima de la mesa de tiro", cuenta su creador, David Prince.
Ante la polémica que genera la modalidad, su dueño asegura que "nadie está desatendido", y añade: "Los padres son asesorados uno por uno para que la experiencia con su hijo sea segura".
Las opiniones entre los vecinos adultos del campito están divididas: muchos están encantados con la idea que, en muchos casos, refleja sus propios hobbies; otros se oponen rotundamente a que sus hijos manejen armas de fuego y aseguran que a los ocho años los niños no pueden diferenciar el juego de la realidad.
Recordemos que en Estados Unidos entre 260 y 300 millones de armas de fuego están en manos de civiles, es decir, cerca de un tercio de los hogares cuenta con una.
Por esto, no es casualidad la gran cantidad de tiroteos públicos y accidentes con armas que vivió y vive el país: sólo durante el año pasado, fueron atendidos más de 73 mil pacientes en salas de urgencia por causa de lesiones con arma de fuego, según un cálculo de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos CDC.