Polémica en una facultad: los baños serán mixtos
Resolvió esa medida la decana de la facultad de Periodismo y Comunicación Social de la Universidad Nacional de La Plata, "para lo que cada uno decida y quiera ser".
La decana de la facultad de Periodismo y Comunicación Social de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), Florencia Saintout, resolvió que ya no existan baños separados para varones y mujeres en esa unidad académica, sino que "ahora serán en forma indistinta para varones, mujeres y para lo que cada uno decida y quiera ser".
En un breve comunicado que el decanato subió a la web de la facultad, se indica que la medida se tomó "ante el profundo cambio cultural al cual estamos asistiendo en Argentina en materia de género" y "teniendo en cuenta que en el día de la fecha –en referencia al lunes pasado- entra en plena vigencia la Ley N° 26.743 de Identidad de Género".
La medida generó polémica, y en ese marco las alumnas y alumnos consultados, con matices, coincidieron en calificar a la resolución como "simbólica" o "superficial", según lo señalado por el diario El Día de esta ciudad.
Además hicieron hincapié en que significará la "pérdida de la intimidad", sobre todo para las mujeres, y opinaron que por más que saquen los carteles que identifican a los baños "todos seguirán usando el mismo".
Sobre los argumentos de la medida, el secretario Académico de Periodismo, Carlos Ciappina, dijo que "la facultad ha estudiado mucho la temática, pues tiene áreas de trabajo e investigación sobre comunicación y género".
Dijo que con esa base "se decidió iniciar un proceso de uso común de los baños que acota toda la división de géneros que existe en la sociedad para evitar discriminaciones", al tiempo que reconoció que será una "construcción gradual".
La flamante normativa nacional permite adoptar la identidad de género autopercibida, pero los géneros en sí se mantienen.
"Nosotros no los 'eliminamos' -argumentó Ciappina-. Hacemos todo lo contrario, es decir, promover el uso común de sanitarios sin discriminar entre géneros".
En cuanto a la estructura de los baños, explicó que el trabajo se hará sobre el de varones, quitando los mingitorios o separándolos de la zona de uso común.
Entre los alumnos que estaban al tanto de la medida, las opiniones iban mayormente en contra. "No hay ningún motivo para hacer esto. En mi opinión es para generar polémica", dijo uno de ellos, Nicolás Vanina, para quien "nadie estará tranquilo porque se perderá la privacidad".
"Para nosotros no es tan complicado, pero creo que a las mujeres les implicará una invasión muy grande a su intimidad. Además, creo que se seguirán respetando los espacios y que nadie se va a mezclar", opinó otro estudiante, Santiago Ajaka.
Antonela Menunto enfatizó que está de acuerdo con todo lo que tiene que ver con la igualdad en cuestión de identidad de género, pero que le parece "absurdo compartir el baño. Será complejo, hay cuestiones muy íntimas", añadió.
A su vez, la decana de Psicología, Edith Pérez, habló de usos y costumbres. "Primero hay que ver cómo es recibida una resolución así, y luego hay que ser conscientes de que llevará mucho tiempo que se instale un cambio tan grande", dijo.
En un breve comunicado que el decanato subió a la web de la facultad, se indica que la medida se tomó "ante el profundo cambio cultural al cual estamos asistiendo en Argentina en materia de género" y "teniendo en cuenta que en el día de la fecha –en referencia al lunes pasado- entra en plena vigencia la Ley N° 26.743 de Identidad de Género".
La medida generó polémica, y en ese marco las alumnas y alumnos consultados, con matices, coincidieron en calificar a la resolución como "simbólica" o "superficial", según lo señalado por el diario El Día de esta ciudad.
Además hicieron hincapié en que significará la "pérdida de la intimidad", sobre todo para las mujeres, y opinaron que por más que saquen los carteles que identifican a los baños "todos seguirán usando el mismo".
Sobre los argumentos de la medida, el secretario Académico de Periodismo, Carlos Ciappina, dijo que "la facultad ha estudiado mucho la temática, pues tiene áreas de trabajo e investigación sobre comunicación y género".
Dijo que con esa base "se decidió iniciar un proceso de uso común de los baños que acota toda la división de géneros que existe en la sociedad para evitar discriminaciones", al tiempo que reconoció que será una "construcción gradual".
La flamante normativa nacional permite adoptar la identidad de género autopercibida, pero los géneros en sí se mantienen.
"Nosotros no los 'eliminamos' -argumentó Ciappina-. Hacemos todo lo contrario, es decir, promover el uso común de sanitarios sin discriminar entre géneros".
En cuanto a la estructura de los baños, explicó que el trabajo se hará sobre el de varones, quitando los mingitorios o separándolos de la zona de uso común.
Entre los alumnos que estaban al tanto de la medida, las opiniones iban mayormente en contra. "No hay ningún motivo para hacer esto. En mi opinión es para generar polémica", dijo uno de ellos, Nicolás Vanina, para quien "nadie estará tranquilo porque se perderá la privacidad".
"Para nosotros no es tan complicado, pero creo que a las mujeres les implicará una invasión muy grande a su intimidad. Además, creo que se seguirán respetando los espacios y que nadie se va a mezclar", opinó otro estudiante, Santiago Ajaka.
Antonela Menunto enfatizó que está de acuerdo con todo lo que tiene que ver con la igualdad en cuestión de identidad de género, pero que le parece "absurdo compartir el baño. Será complejo, hay cuestiones muy íntimas", añadió.
A su vez, la decana de Psicología, Edith Pérez, habló de usos y costumbres. "Primero hay que ver cómo es recibida una resolución así, y luego hay que ser conscientes de que llevará mucho tiempo que se instale un cambio tan grande", dijo.