Persecución, choque, muerte y robo: Un detenido
Un joven fue detenido en una villa de San Martín acusado de haber participado del asalto en el que un hombre murió cuando perseguía a dos delincuentes que le habían robado a sus hijos y chocó contra el frente de un taller mecánico de Villa Ballester, en ese partido bonaerense.
Se supo este domingo que el sospechoso, de 22 años, es el segundo apresado por este hecho, cometido en agosto pasado, en esa zona del noroeste del conurbano y en el que murió Ricardo Da Silva (38).
De acuerdo a los voceros, este segundo imputado fue apresado anoche, en calles Bahía Blanca y Bermejo, dentro de la villa "La Rana", en San Martín.
Según las fuentes, el joven quedó detenido a disposición del personal de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 3 del Departamento Judicial San Martín, a cargo de la causa, y será indagado mañana.
La noche del 11 de agosto, Da Silva se encontraba en la puerta de su casa, situada en Quintana 5690, de Villa Ballester, junto a sus dos hijos, uno mayor de edad y una adolescente, que acababan de llegar a bordo de un Volkswagen Polo, cuando fueron sorprendidos por dos delincuentes.
Los asaltantes iban armados y se movilizaban en un Peugeot 307 gris que habían robado una hora antes en la localidad de Carapachay, partido de Vicente López. Los delincuentes amenazaron a padre e hijos con fines de robo y los despojaron de sus efectos personales, como billeteras, teléfonos celulares y camperas, con los que escaparon en el Peugeot en el que habían llegado.
Ante esa situación, Da Silva abordó su camioneta Suzuki Grand Vitara y salió detrás de los ladrones con intenciones de alcanzarlos y recuperar sus pertenencias. A unas 12 cuadras del domicilio, en la bocacalle anegada de Tandil y Santa Adelina, Da Silva perdió el control de la camioneta y, luego de derrapar, se incrustó en el frente de una taller de chapa y pintura.
A raíz del impacto, la camioneta derribó la cortina metálica de ese local y Da Silva murió en el acto.
En tanto, los efectivos de la comisaría de Villa Ballester localizaron cerca de la 1 el auto de los delincuentes, que había sido abandonado a metros de la entrada a "La Rana".
Al continuar con los operativos, y a partir de los datos aportados por los hijos de Da Silva, los efectivos detuvieron al días siguiente a un joven de 25 años dentro de esa villa.
Los pesquisas determinaron que este sospechoso contaba con un pedido de captura del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 2 de San Martín por un robo de 2005.
Poco después de ser apresado, el acusado fue reconocido por la hija de Da silva como uno de los asaltantes por la ropa que llevaba puesta y una cicatriz en el mentón.
De acuerdo a los voceros, este segundo imputado fue apresado anoche, en calles Bahía Blanca y Bermejo, dentro de la villa "La Rana", en San Martín.
Según las fuentes, el joven quedó detenido a disposición del personal de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 3 del Departamento Judicial San Martín, a cargo de la causa, y será indagado mañana.
La noche del 11 de agosto, Da Silva se encontraba en la puerta de su casa, situada en Quintana 5690, de Villa Ballester, junto a sus dos hijos, uno mayor de edad y una adolescente, que acababan de llegar a bordo de un Volkswagen Polo, cuando fueron sorprendidos por dos delincuentes.
Los asaltantes iban armados y se movilizaban en un Peugeot 307 gris que habían robado una hora antes en la localidad de Carapachay, partido de Vicente López. Los delincuentes amenazaron a padre e hijos con fines de robo y los despojaron de sus efectos personales, como billeteras, teléfonos celulares y camperas, con los que escaparon en el Peugeot en el que habían llegado.
Ante esa situación, Da Silva abordó su camioneta Suzuki Grand Vitara y salió detrás de los ladrones con intenciones de alcanzarlos y recuperar sus pertenencias. A unas 12 cuadras del domicilio, en la bocacalle anegada de Tandil y Santa Adelina, Da Silva perdió el control de la camioneta y, luego de derrapar, se incrustó en el frente de una taller de chapa y pintura.
A raíz del impacto, la camioneta derribó la cortina metálica de ese local y Da Silva murió en el acto.
En tanto, los efectivos de la comisaría de Villa Ballester localizaron cerca de la 1 el auto de los delincuentes, que había sido abandonado a metros de la entrada a "La Rana".
Al continuar con los operativos, y a partir de los datos aportados por los hijos de Da Silva, los efectivos detuvieron al días siguiente a un joven de 25 años dentro de esa villa.
Los pesquisas determinaron que este sospechoso contaba con un pedido de captura del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 2 de San Martín por un robo de 2005.
Poco después de ser apresado, el acusado fue reconocido por la hija de Da silva como uno de los asaltantes por la ropa que llevaba puesta y una cicatriz en el mentón.