Periodismo y compromiso
Que el periodista es un sujeto político está más que claro. La historia oficial, naïf, que nos contaron de los hechos de mayo de 1810 incluye la deformación del nacimiento del periodismo criollo.
La Gazeta de Buenos Ayres, publicación creada por Mariano Moreno, cumplía fundamentalmente un rol: el de organizador político de los revolucionarios de mayo.
Concretamente, los periodistas tomamos este día como propio, homenajeando una publicación que constituyó una formidable expresión del denominado "periodismo militante". Nadie entonces –ni ahora– criticó a Mariano Moreno por no ejercer un "periodismo independiente".
Es que el periodismo mal llamado "independiente" empezó a tomar forma cuando la información se transformó en una mercancía, cuando empezó a tener un valor monetario. Pero como las causas por dinero están mal miradas y conviene maquillarlas de otra cosa, empezó entonces a ser necesaria la "mirada objetiva", ese lugar insípido en el que a algunos les gusta instalarse para contar la realidad.
Los periodistas no somos sujetos exentos de convicciones. El desafío está en que esas convicciones no se conviertan en prejuicios a la hora de escribir una historia.
Para quienes hacemos esta revista el periodismo pasa por el compromiso.
Como lo tuvo Moreno, como luego lo repitieron profesionales como Rodolfo Walsh, Haroldo Conti y tantos otros.
Desde Veintitrés contamos la realidad según como la vemos. Y en general nuestra mirada coincide con la de muchos argentinos que ponen el cuerpo en sus trabajos, en la escuela, la facultad. Esos que, con la discusión que sobre el rol de los medios y los periodistas desde hace un tiempo tomó fuerza, se dan cuenta de las "operaciones" que instalan algunos medios que se autodefinen como "objetivos e independientes".
Bienvenida la actual discusión entre periodistas y empresas periodísticas.
En especial cuando se discuten ideas más que los "prontuarios" de tal o cual profesional.
En estos días donde recordamos la creación de La Gazeta de Mariano Moreno, reafirmamos ante nuestros lectores que estamos parados de este lado, el del compromiso con los derechos humanos y la democracia, con la justicia social, con la educación pública y gratuita, y con tantas otras causas tan justas como necesarias. Ese es el periodismo que nos gusta y ejercemos.
El del compromiso.