Pérez Esquivel repudió la represión en Tinogasta
El premio Nobel de la Paz, aseguró que "es repudiable la actitud represiva del gobierno catamarqueño contra los jóvenes asambleístas".
El premio Nobel de la Paz 1980, Adolfo Pérez Esquivel, repudió hoy la represión policial y detención de tres manifestantes antimineros en la localidad catamarqueña de Tinogasta.
"Es repudiable la actitud represiva del gobierno catamarqueño contra los jóvenes asambleístas", dijo el escultor y arquitecto galardonado con el Nobel de la Paz en 1980, en plena dictadura militar.
Pérez Esquivel utilizó este lunes su cuenta en la red social Twitter para dar a conocer a su enojo por el maltrato que efectivos de la Infantería catamarqueña le dieron a tres manifestantes en la tarde del sábado.
Un grupo de manifestantes se encontraba realizando un corte selectivo e informativo en el Paso Internacional San Francisco, sobre la ruta 60, cuando de pronto a las 14:30 del sábado arribó una camioneta con una decena de efectivos uniformados, con cascos, escudos, bastones y gas pimienta.
Sin mediar palabras, la Policía saltó sobre los manifestantes y los arrestó, después de forcejeos durante varios minutos.
Los manifestantes permanecían detenidos en la localidad de Fiambalá, a unos 322 kilómetros de San Fernando del Valle de Catamarca.
Pérez Esquivel expresó fuertes críticas contra la administración de Lucía Corpacci al afirmar que "dicen proteger a los ciudadanos pero en realidad protegen a las empresas mineras".
"Es repudiable la actitud represiva del gobierno catamarqueño contra los jóvenes asambleístas", dijo el escultor y arquitecto galardonado con el Nobel de la Paz en 1980, en plena dictadura militar.
Pérez Esquivel utilizó este lunes su cuenta en la red social Twitter para dar a conocer a su enojo por el maltrato que efectivos de la Infantería catamarqueña le dieron a tres manifestantes en la tarde del sábado.
Un grupo de manifestantes se encontraba realizando un corte selectivo e informativo en el Paso Internacional San Francisco, sobre la ruta 60, cuando de pronto a las 14:30 del sábado arribó una camioneta con una decena de efectivos uniformados, con cascos, escudos, bastones y gas pimienta.
Sin mediar palabras, la Policía saltó sobre los manifestantes y los arrestó, después de forcejeos durante varios minutos.
Los manifestantes permanecían detenidos en la localidad de Fiambalá, a unos 322 kilómetros de San Fernando del Valle de Catamarca.
Pérez Esquivel expresó fuertes críticas contra la administración de Lucía Corpacci al afirmar que "dicen proteger a los ciudadanos pero en realidad protegen a las empresas mineras".