Paranoia por el coronavirus en Argentina: no se olviden del dengue y el sarampión
Hora tras hora, los medios de comunicación se desesperan por dar la última novedad sobre el coronavirus. Pero otras enfermedades pierden terreno en la pantalla.
La situación en el mundo por la rápida propagación del coronavirus es alarmante, pero en la Argentina el estado de alerta debe pasar por prestar atención a otras enfermedades que ya se presentan en nuestro territorio: el dengue y el sarampión.
Día tras días, los noticieros reproducen centenares de minutos de informes sobre el coronavirus, una enfermedad que todavía no se hizo presente en nuestro país. Es cierto que cada día más países presentan personas afectadas. Pero en Argentina no llegó.
Lo que sí parece es que los medios están atentos, y con ganas, de que aparezca el primer infectado. Así se va formando un clima de paranoia en la opinión pública: llegamos así al ridículo caso en el que dos jóvenes se “auto aislaron” para preservarse, acusando que no los revisaron cuando llegaron de China. Rápidamente los medios se hicieron eco de esta historia y hasta los entrevistaron en su casa. ¿No se suponía que estaban aislados para evitar el contagio? Pura pantomima. O irresponsabilidad.
Si, los números alarman. La cantidad de contagiados crece y crece, y hasta aparecen casos en lugares asiduos para los turistas. Pero la tasa de mortalidad del nuevo coronavirus es menor que la gripe común, y afecta predominantemente a personas con sus defensas bajas, producto de otras enfermedades.
Sí, hay que tener preocupación. Pero no es necesario salir corriendo a comprar barbijos y alcohol en gel, cuyos precios se disparan durante estos climas de paranoia. Lo que sí es esencial es que se tengan los recaudos necesarios para evitar el contagio de otras enfermedades que ya están presentes en nuestro país: el brote del dengue y la reaparición del sarampión. Y cuyo peligro es real, no especulación.
En la lucha contra el dengue todos podemos colaborar, eliminando principalmente los focos de agua estancada donde crece el mosquito que lo transmite. Los números de casos importados se acumulan cada vez más en los últimos días, se vaticina que el brote aumentará en las próximas semanas y ya hay alarma por algunos casos autóctonos. E incluso ya se cuentan dos víctimas fatales en el país.
En los últimos días también se contabilizó la primera víctima fatal por sarampión, una enfermedad que estaba erradicada del país desde hace 20 años pero que resurgió en los últimos meses. Entre las principales causas de esta terrible situación, que cuenta con más de 120 contagios, se encuentran la falta de campañas por parte del Gobierno –nacional, provincial o municipal- o al crecimiento del irresponsable movimiento anti-vacunas.
Es por ello que es preciso tener participación en evitar que estas dos enfermedades se sigan propagando y reclamar a las autoridades del Gobierno a que realicen todas las tareas necesarias para combatir estos brotes, sin descuidar la situación internacional del coronavirus. Pero estas dos causas, las del dengue y el sarampión son tan urgentes, o más, que la nueva gripe. Y es necesario que los medios también informen lo suficiente sobre ellas. Pero sin alarmismo.
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