Para el nuevo año, Francisco desea una vida de "alegría y esperanza"
El Sumo Pontífice brindó la primera misa del año y se refirió, entre otras cosas, a la fraternidad que debe existir entre las personas.
El Papa Francisco realizó su primera misa del año, coincidente con la Jornada Mundial de la Paz y brindó un mensaje de esperanza, especialmente para los sectores más necesitados.
"La bendición acompañará nuestro camino durante el tiempo que ahora nos espera. Son palabras de fuerza, de valor, de esperanza. No de una esperanza ilusoria, basada en frágiles promesas humanas; ni tampoco de una esperanza ingenua, que imagina un futuro mejor sólo porque es futuro", dijo el Pontífice.
Luego agregó: "Esta esperanza tiene su razón de ser precisamente en la bendición de Dios, una bendición que contiene el mejor de los deseos, el deseo de la Iglesia para todos nosotros, impregnado de la protección amorosa del Señor, de su ayuda providente".
Además, les deseó a todos una "vida llena de alegría y esperanza" y se refirió a la fraternidad: "La viva conciencia de este carácter relacional nos lleva a ver y a tratar a cada persona como una verdadera hermana y un verdadero hermano; sin ella, es imposible la construcción de una sociedad justa, de una paz estable y duradera".