Papa Francisco: visitó de sorpresa la Basílica de Roma para rezar
Visitó hoy la basílica Santa Maria Mayor, en Roma, en donde rezó, a poco de su inminente partida a Rio.
Es la segunda vez, en realidad, que el argentino Jorge Mario Bergoglio se dirige a la basílica de la capital italiana desde su llegada a Roma; aquella primera vez, sin embargo, aún no había sido elegido como sucesor de San Pedro.
En "Santa Maria Maggiore", Francisco pidió la protección de la Virgen en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), informó una nota de la sala de prensa vaticana.
Fue una visita que duró más de una hora. El Papa llegó cerca de las 16.45 y fue recibido por el Cardenal Arzobispo Santos Abril y Castelló. Entró por una puerta lateral a la Sacristía y enseguida se dirigió a la Capilla, donde se encuentra la imagen de la virgen Salus Populi Romani. A las 18 horas locales, el Santo Padre ya estaba de regreso en Vaticano.
Ante la Virgen, el Papa mantuvo una oración silenciosa de una media hora. Luego, dejó una oferta floral ante la imagen mariana y encendió una vela que exhibía el logo de la JMJ.
La basílica romana estaba abierta al público cuando ocurrió la visita de Francisco, que dejó boquiabiertos a los fieles presentes. A ellos dirigió unas pequeñas palabras cuando se acercaron.
El Papa aprovechó para pedirles que lo acompañaran "con la oración, con la confianza y con la penitencia" en su viaje a Brasil para su encuentro con jóvenes de todo el mundo.
En "Santa Maria Maggiore", Francisco pidió la protección de la Virgen en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), informó una nota de la sala de prensa vaticana.
Fue una visita que duró más de una hora. El Papa llegó cerca de las 16.45 y fue recibido por el Cardenal Arzobispo Santos Abril y Castelló. Entró por una puerta lateral a la Sacristía y enseguida se dirigió a la Capilla, donde se encuentra la imagen de la virgen Salus Populi Romani. A las 18 horas locales, el Santo Padre ya estaba de regreso en Vaticano.
Ante la Virgen, el Papa mantuvo una oración silenciosa de una media hora. Luego, dejó una oferta floral ante la imagen mariana y encendió una vela que exhibía el logo de la JMJ.
La basílica romana estaba abierta al público cuando ocurrió la visita de Francisco, que dejó boquiabiertos a los fieles presentes. A ellos dirigió unas pequeñas palabras cuando se acercaron.
El Papa aprovechó para pedirles que lo acompañaran "con la oración, con la confianza y con la penitencia" en su viaje a Brasil para su encuentro con jóvenes de todo el mundo.