Pablo Colangelo, el argentino que ganó el concurso para ir a vivir a un pueblo de Italia
Es uno de los 5 voluntarios elegidos por la plataforma Airbnb y la ONG Wonder Grottole para convertirse en habitantes del pueblo Grottole, provincia de Matera.
Cuando Pablo Colangelo (35) leyó en qué consistía el concurso para vivir tres meses en un rincón casi deshabitado de Italia, pensó que era una gran oportunidad para escapar de la ciudad, ayudar a revitalizar la comunidad de Grottole y dejar una huella en Italia, como una forma de agradecimiento a la que dejó su abuelo paterno cuando vino a Argentina.
"Al principio no creí que me fueran a eligir, pero mi novia Lorena me convenció y nos presentamos los dos por separado (ella no quedó). Le puse mucha energía a la solicitud en enero y me olvidé, hasta que a fines de marzo me llamaron", le cuenta Pablo Colangelo a Clarín desde Puerto Morelos, México, donde está haciendo un curso de buceo que ya tenía planificado.
Lo llamaron un viernes de marzo para hacerle una entrevista por Skype y, al lunes siguiente, lo volvieron a contactar para una segunda "entrevista": en realidad, lo estaban grabando para ver cómo reaccionaba cuando le decían que era uno de los cinco voluntarios elegidos.
Este martes 7 se dieron a conocer los nombres de los candidatos elegidos por la plataforma Airbnb y la ONG Wonder Grottole para que cinco voluntarios vivan como "habitantes" de Grottole, provincia de Matera. La experiencia se prolongará de junio a agosto de este año.
Entre más de 280.000 solicitudes de todo el mundo (40.000 fueron de nuestro país), Pablo Colangelo fue el único argentino elegido para este "Sabático Italiano".
Ingeniero en sistemas recibido en la UTN, Pablo trabaja en forma independiente como consultor de informática y vive en el barrio porteño de Monte Castro. Se lo escucha entusiasmado con el espíritu de la propuesta: "Me gusta mucho viajar, pero no a los lugares súper turísticos, me gustan los pueblitos. Aparte, nunca hice un voluntariado ni estuve viviendo en un área rural. Por ser la primera vez, arranqué con todo".
"Huerta comunitaria, apicultura, cocina italiana... Y la idea de ayudar a revitalizar el casco histórico y aplicar mis conocimientos en sistemas para darle visibilidad a esta comunidad a través de las nuevas tecnologías... Esta iniciativa encaja mucho con mi estilo de vida", dice Pablo.
¿Por qué lo habrán elegido? "Debo haber sonado bastante auténtico porque realmente creo en el proyecto que están realizando en Grottole", asegura. Y como yapa, podrá conocer Brienza, el pueblo donde nació su abuelo, que queda a solo una hora de Grottole.