Otro crimen en Rosario: murió un joven que había sido baleado por sicarios en su casa
Lo habían atacado el mismo día en que asesinaron al primer taxista, aunque la lógica de este crimen difiere con la de los homicidios de los choferes, del colectivero y el playero: fue dirigido.
Murió Mario Ezequiel Marini (22), el joven que había sido baleado el martes pasado por sicarios que llegaron a su casa, golpearon y le dispararon a quemarropa cuando atendió la puerta. La lógica de este crimen, que ocurrió el mismo día del asesinato del primer taxista, en nada se parece a cómo actuaron los asesinos de los choferes, del colectivero y del playero, que eligieron víctimas que nada tenían que ver con el submundo narco. La víctima identificó a su homicida antes de morir.
Marini falleció tras permanecer internado en grave estado durante una semana en la terapia intensiva del Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca). Había sido atacado a tiros el pasado 5 de marzo, poco antes de las 19, en su vivienda ubicada en Corrientes al 3100, de Villa La Lata.
Fuentes del caso informaron a Infobae que “la víctima se encontraba en su domicilio, cuando se aproximaron dos hombres hasta la puerta de la vivienda y uno de ellos gritó: ‘Mario’. Cuando el joven salió de su casa le dispararon dos veces”.
Uno de los balazos impactó en el pecho y otro en una de sus piernas. Tras el ataque, los sicarios escaparon, pero la víctima llegó a decirles a familiares y vecinos: “Fue el ‘Juanma’ el que le tiró los tiros”, confiaron las fuentes consultadas por este medio.
Según la causa, que primero estuvo a cargo de la Unidad Especial de Balaceras, Amenazas y Extorsiones y ahora quedó en manos de la Fiscalía de Homicidios Dolosos, el ataque ocurrió dentro de la casa de la víctima y a muy corta distancia. “Aún no estaba claro el móvil”, dijeron.
Pese a ello, Marini se convirtió en la quinta víctima de la violencia narco en la semana que pasó, la sexta en lo que va de marzo. Claro que el crimen del joven tiene características diferentes al de los taxistas Diego Celentano y Héctor Figueroa; el del colectivero Marcos Caiola y el playero de estación de servicio Bruno Bussanich, ejecutado por un sicario en una estación de servicio Puma de Rosario este sábado.
Justamente, este martes dos sospechosos de 19 años fueron detenidos durante nueve allanamientos simultáneos por el crimen del playero, indicaron fuentes de la causa.
Los procedimientos, a cargo de la Policía de Santa Fe, se realizaron en el barrio 7 de Septiembre. En un domicilio de Schweitzer al 7800, las Tropas de Operaciones Especiales (TOE) detuvieron a Tiago Andrés P. de 19 años, a quien le secuestraron teléfonos y prendas de vestir de interés para la investigación.
En una vivienda de Los Arrayanes al 1800 detuvieron a otro sospechoso, Tiziano Uriel C. de 19 años, al que le secuestraron dos teléfonos y otros dispositivos electrónicos.
(Fuente: Infobae)
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