Otra fuga de presos: dos detenidos se escaparon de una comisaría de Balvanera
Los dos detenidos cortaron la reja de uno de los calabozos y huyeron. Quién son y sus antecedentes.
Dos presos se escaparon este lunes de una comisaría de Balvanera tras cortar la reja de uno de los calabozos, horas después de que nueve presos se fugaran de una dependencia de San Telmo.
Esta nueva fuga se dio en la alcaidía 3°, que está ubicada en Lavalle al 2600, en plena zona comercial de Once, indicaron desde la Policía de la Ciudad en un comunicado. Ambos prófugos estaban presos por robo y uno de ellos sumaba un pedido de captura de la Justicia bonaerense.
Según fuentes a las que accedió Clarín se trata de Miguel Escobar y Walter Ramos, ambos con frondosos prontuarios.
Escobar debería haber estado preso en dependencias de la Provincia de Buenos Aires, pero fue capturado por la policía porteña. Tiene una condena por tenencia ilegal de arma de fuego, en los juzgados de San Isidro y, en paralelo, se lo acusó de tráfico de drogas en otro tribunal bonaerense.
Por su parte, Ramos tuvo una causa por robo en el Ferrocarril San Martín del 2015, por la que fue sobreseído en 2018. Pero, en paralelo a aquel expediente, se lo condenó en un juicio abreviado a 10 meses por otro robo en el partido de San Martín. Recuperó la libertad en 2020 y desde entonces entró y salió de la cárcel. En 2022, pasó tres meses preso, con condena de reincidente, por el arrebato de un celular en Balvanera. En noviembre de ese año volvió a ser condenado, a cuatro meses, por intento de robo. Ahora estaba detenido sin condena por un nuevo asalto.
Las mismas fuentes precisaron que detectaron la fuga durante una requisa en el calabozo donde estaban alojados los dos ahora prófugos. Allí, antes funcionaba como vestuario de la dependencia policial.
De acuerdo a las primeras investigaciones, los prófugos escaparon por un patio interno que a da a un comercio aledaño del rubro textil. Agentes de la policía hablaron con el dueño de ese local, quien indicó que no posee cámaras de seguridad, y en ningún momento observó ni escuchó movimientos extraños en el interior de su propiedad.
Este hecho se da sólo unas horas después de que nueve presos se fugaran de la Alcaidía° 1 de San Telmo, en Perú al 1000. Dos de ellos fueron recapturados, pero siete continúan prófugos.
Para el operativo de recaptura se dispuso el corte de varias calles de la zona, a metros del Mercado de San Telmo -una zona turística de la Ciudad- y hasta se sobrevoló con un helicóptero.
La Ciudad enfrenta una crisis carcelaria cada vez más profunda. El número de detenciones no para de crecer y, según reconocen en el gobierno, la cantidad de presos pasó de 1.800 a 2.005 en tres meses de gestión.
De hecho, la comisaría de San Telmo tiene una capacidad para alojar transitoriamente a 12 personas, pero a las 21 de este domingo, cuando se dio la fuga, había 20 alojados allí.
Los presos porteños están en manos del Servicio Penitenciario Federal (SPF) y de la Justicia Nacional porque muchos delitos no han migrado a la órbita de la Ciudad y porque no tienen penales propios.
El reclamo del gobierno de la Ciudad
En medio de la conmoción por la fuga de presos, el jefe de Gobierno de la Ciudad, Jorge Macri, advirtió que “las comisarías porteñas no están preparadas para la cantidad de detenidos" que alojan actualmente.
"Necesitamos que el Gobierno Nacional se los lleve al Servicio Penitenciario Federal", reclamó Macri en declaraciones radiales y puntualizó que el 94% de los detenidos son de la Justicia Nacional o Federal, por lo tanto "no son competencia de la Ciudad".
En tanto, el ministro de Seguridad porteño, Waldo Wolff, sostuvo que están trabajando junto al gobierno nacional para "descomprimir esta situación".
"Nosotros tenemos un 14% más detenidos en los 3 meses que llevamos de gestión. Asumimos con 1.800 detenidos, hoy tenemos 2.005. Un récord que pone en riesgo nuestro éxito a cierta provisión de seguridad porque cada vez que tenemos más detenidos, tenemos que poner más gente a cuidarlos y sacamos gente de la calle”, indicó Wolff.
En este punto, el funcionario porteño enfatizó que "las comisarías no están ni habilitadas ni preparadas para albergar esta cantidad de presos”.
Dejá tu comentario