Oriana Sabatini reveló que estudia tanatopraxia y generó sorpresa

Oriana Sabatini es dueña de una vida soñada. Además de ser la hija de dos grandes talentos como Catherine Fulop y Ova Sabatini y sobrina de la famosa tenista Gabriela Sabatini, desde 2018 se encuentra en pareja con Paulo Dybala, una de las grandes estrellas del fútbol mundial.

Al poco tiempo de ponerse de novia, la joven de 26 años decidió dejar el país e irse a vivir a Italia con él, para acompañarlo y apoyarlo en lo que significa estar lejos de su familia. Pero todo eso lo hizo sin descuidar su carrera artística, porque además de actriz es cantante y en el medio fue haciendo algunos lanzamientos que se volvieron furor. 

Recientemente, Oriana Sabatini regresó al país, y como se supo gracias a un error de Wanda Nara, grabó su participación en el programa de Telefe, Quién es la máscara, conducido por Natalia Oreiro. Pero también volvió con el objetivo de pasar tiempo con su familia, de la cual es muy cercana y no acepta extrañar tanto.

Pero su vuelta trajo también una terrible bomba que nadie se esperaba sobre la hija de Cathy Fulop. La joven artista visitó el programa de Nico Occhiato, Nadie dice nada, y reveló que también empezó a estudiar de manera virtual. Cuando le preguntaron qué estaba estudiando, dejó a todos atónitos con la respuesta.

Estoy haciendo un curso de tanatopraxia, que son aquellas personas que preparan los cuerpos para los velorios, porque me encanta. Me resulta apasionante estar con un cuerpo sin vida”, contó Oriana Sabatino y sumó más datos al respecto: "Todavía no interactué con un cuerpo sin vida, pero va a pasar porque cuando termine la teoría debo hacer la práctica”.

La joven también reveló cómo es el plan de estudios de esta particular especialización: "Se estudia para maquillar el cuerpo y también para abrirlo y sacarle los órganos”. Para sorpresa de muchos, también sumó que le encantaba la medicina forense, pero que era un compromiso para el que no estaba preparada.

“Descubrí esto de la tanatopraxia y me enteré que se podía estudiar haciendo un curso bastante corto y dije por qué no… No sé qué va a pasar el día que tenga que estar frente a un cuerpo sin vida y manipularlo, y tengo la sensación de que me va a bajar la presión porque me va a causar impresión verlo...", cerró.