Operativo Sol
El viernes, el conductor interrumpió sorpresivamente sus vacaciones en Punta del Este y emprendió un viaje relámpago a Buenos Aires. Le dejó los chicos a Paula Robles, y se encontró con su noviecita.
Muchas son las especulaciones que giran en torno de la vida sentimental del exitoso conductor televisivo Marcelo Tinelli (50). Después de conocerse la noticia que reveló que el famoso empresario mantiene una relación sentimental con Solange Calabró (33), seguramente la ilusión de muchas mujeres se hizo trizas.
A pesar de no oponerse de ningún modo, ni de manifestar demostraciones de molestia cuando la noticia fue publicada, Marcelo tampoco habló con los medios de comunicación, que rápidamente desparramaron la buena nueva. Simplemente guardó silencio. No admitió, ni tampoco desmintió.
Instalado en Guanahaní, su fabulosa chacra esteña, Marcelo cambió su rutina en los días que siguieron. Se mantuvo alejado de los flashes, no asistió al boliche Tequila –donde se lo veía habitualmente– ni tampoco bajó a la playa a tomar sol, actividad que suele realizar a diario. Se tomó un par de días para asimilar y reflexionar sobre la fuerte repercusión mediática que había causado la divulgación de su romance. Sin embargo, el viernes, de manera sorpresiva, el soltero más codiciado de la Argentina realizó un viaje relámpago a Buenos Aires. La decisión de regresar generó todo tipo de dudas tanto en el ambiente artístico como en el ámbito periodístico. ¿Por qué Marcelo decidió interrumpir abruptamente sus ansiadas y merecidas vacaciones para regresar a la Argentina? Todo tipo de especulaciones se tejieron en torno a aquel viaje. Lo cierto es que el empresario llegó a Buenos Aires en su jet privado y acompañado de Francisco y Juana, sus hijos más chicos. Aquí, los esperaba su madre, Paula Robles, lista para emprender sus vacaciones con ellos en Cancún, para disfrutar de las playas del Caribe. Ocurre que Marcelo y Paula habían acordado de antemano que los hijos pasarían 15 días con cada uno, como sucede habitualmente cuando una pareja está divorciada.
Una vez en Buenos Aires, y después de dejar a los niños con su mamá, en la noche del viernes, Marcelo aprovechó la ocasión para disfrutar de un encuentro íntimo con Solange, o Sol, como la llaman todos sus amigos.
Según trascendidos, la pareja se habría reunido y habría disfrutado de compartir un momento a solas, lejos de los curiosos y de las cámaras. Sol, quien guarda un asombroso parecido físico con Paula Robles, se destaca por su bajo perfil, característica que también comparte con la ex esposa de Tinelli.
Ella se desarrolla laboralmente en el área de marketing de la productora Ideas del Sur, propiedad de Marcelo, y es la ex secretaria de Claudio Salomone, quien fue cuñado de Tinelli, ya que está casado con Celina, la hermana de Paula Robles.
Según allegados a Sol, existirían versiones que indican que Marcelo le habría pedido que setomara unos días de descanso, que se alejara "del ruido" por un puñado de semanas. Aquella sería tal vez una estrategia que les permitiría aprovechar el momento hasta lograr que se calmen las aguas, y así conseguir que el efecto mediático de la noticia deje de ser tan fuerte.
La joven, de contextura delgada y de actitud delicada, también es divorciada. Ella, sin pertenecer al mundo del espectáculo, fue la que desplazó a más de una bailarina, cantante o vedette que quiso ocupar un lugar en el corazón de Marcelo. Nombres de bellas mujeres se asociaron al de Tinelli. A las modelos Liz Solari, Paula Chaves, a la vedette Silvina Luna y a la cantante Patricia Coki Ramírez se las vinculó al conductor y se les endilgó un romance con él. Pero una mujer sencilla, criada en San isidro, de muy bajo perfil fue quien, aparentemente, libró y ganó una de las batallas más duras: conquistar el corazón del hombre más deseado del país.