Olivera: "No es cierto que comió comida de perro, esa es mucho mas cara"
Jesús Olivera, el acusado por el secuestro de Coronel Suárez habó en "Hola Chiche" desde la cárcel y desmintió nuevamente a Sonia.
Jesús Olivera, el acusado de secuestrar a Sonia Molina en Coronel Suárez habló desde la cárcel con Chiche Gelblung. El principal sospechoso desmiente todo y dice que ellos sólo ayudaron a la víctima.
"Los videos no existen porque si no hay hecho no hay pruebas y acá están diciendo que hay pruebas, la declaración de Sonia es muy diferente a lo que se esta diciendo. Los videos son de cómo Sonia Molina llego a nuestra casa esa noche. Hay uno solo, cortado en dos partes, no está todo porque no la vamos a estar filmando mientras la ayudamos". El acusado luego agregó: "Muestran lo que hizo Sonia esa noche, que llegó en un estado malo, orinó en la sala, se arrastraba, nada mas y cada vez que hacia algo decía que no era ella, que tenia zumbidos en el oído y se desmayaba y volvía enseguida".
"Yo estoy casado con Estefanía, y ella era parte de una ONG, ahora ya no. Yo soy un predicador evangélico. Lo de la ONG lo estan llevando para el lado religioso y nada que ver, sino que trabaja mucho con lo que es la integración. Cumplíamos sueños de la gente, como Showmatch", dijo Olivera respecto a su situación antes del confuso episodio.
Por su relación con Sonia explicó: "Yo la conocí porque ella iba a una iglesia de Río Colorado y la conocí por medio del pastor".
"Ella cometió fraudes, vendió dos veces una misma casa y esos no son valores cristianos. Nos dio solo una parte de esa plata, yo no sabia que había venido de un fraude. La señora a la que ella le vendió la casa la estaba amenazando", dijo el acusado.
Luego, relató la primera vez que notó algo raro en Sonia: "Estábamos grabando un asado y ahí vimos algo raro en Sonia, que dijo que sentía deseos de matarme, una persona que dice eso, que quiso matar al ex marido, que quiso matar a su hija… creo que este muy bien".
Recordó nuevamente el momento en que Sonia llegó a su casa: "Orinó en el living, yo pensaba que era un juego, una vez anterior ya había hecho eso y le echo la culpa al perro. No es cierto que comió comida de perro. Tenemos cinco perros y la comida de ellos es mucho mas cara que la nuestra, no nos daría el presupuesto".
La situación que relata Olivera es algo confusa: "No la veíamos todos los días, no convivía con nosotros, no estuvo cautiva, nuestras ventanas no tienen rejas, supuestamente ella tenia dos trabajos, uno trabajando con una familia, cuando dice que yo la golpeé en el ojo y le deje un hematoma pero nadie lo vio. Yo si la vi con una mandíbula hinchada".
"Ella dice que me parezco al ex marido y no soy parecido. Que es coherente es lo que dice la gente de Suárez, pero también se dice que ella tiene un patrón. Ustedes mismos se tienen que dar cuenta en las notas que ha hecho, que se contradice mucho", reiteró Olivera.
"Pedí el detector de mentiras pero para todos, para las tres partes. Yo lo pedí para el juicio, antes de la preventiva. Yo necesito que se compruebe nuestra inocencia, pero si me decís que no sirve judicialmente…no se", concluyó el acusado.