"Nunca le mandé mensajes a Mariela"
El acusado por el misterio de Inriville declaró ayer ante el fiscal. Qué dijo.
El expolicía Jorge Orellano, detenido en el marco de la causa que investiga la misteriosa desapareción de Mariela Bortot (40), se declaró inocente y dijo que "nunca le envié mensajes" a la mujer, durante las casi dos horas que duró la indagatoria ante el fiscal de instrucción Gustavo Zuchiatti.
Orellano, sospechado por la desaparición de Bortot, quien es buscada en la ciudad cordobesa de Inriville desde el 25 de enero pasado, sostuvo que nunca existió un intercambio de mensajes de texto, según publicó hoy el diario La Mañana de Córdoba.
Durante la indagatoria, dio un pormenorizado relato de sus acciones el día que se vio por última vez a la mujer.
Según trascendió, Orellano indicó que esa jornada estuvo trabajando en los campos del intendente Rodrigué, donde realizaba tareas de vigilancia. En su regreso al pueblo se habría empantado, por lo que debió realizar tareas para poder zafar con su vehículo.
Según confirmaron fuentes allegadas a la investigación, sostuvo lo mismo que en sede policial.
Cabe recordar que el expolicía de 51 años está imputado del supuesto delito de "privación ilegítima de la libertad".
Los resultados de la pericia de la Policía Judicial sobre el vehículo de Orellano serán clave para definir su futuro procesal. Se espera que esto ocurra antes de fin de mes.
Por su parte, tal como informa La Mañana, el abogado local Horacio Baleani, que asiste a la familia Bortot, indicó a este diario que se deberá aguardar el cruce de declaraciones que realiza el fiscal a partir de esta indagatoria.
En tanto, desde la defensa -encarada por los doctores Miguel Barovero y Francisco Lavisse- destacaron que en el expediente figura una charla que mantuvo con una de las hijas de la mujer desaparecida. E incluso su colaboración en la búsqueda de Bortot.
Finalmente, se había reforzado la vigilancia al cauce del río Calamochita y parte del Carcarañá, luego que un pescador declarara que había encontrado un cuerpo flotando en el río, pero se asustó y lo dejó ir, pero aún no hay encontrado nada.
Orellano, sospechado por la desaparición de Bortot, quien es buscada en la ciudad cordobesa de Inriville desde el 25 de enero pasado, sostuvo que nunca existió un intercambio de mensajes de texto, según publicó hoy el diario La Mañana de Córdoba.
Durante la indagatoria, dio un pormenorizado relato de sus acciones el día que se vio por última vez a la mujer.
Según trascendió, Orellano indicó que esa jornada estuvo trabajando en los campos del intendente Rodrigué, donde realizaba tareas de vigilancia. En su regreso al pueblo se habría empantado, por lo que debió realizar tareas para poder zafar con su vehículo.
Según confirmaron fuentes allegadas a la investigación, sostuvo lo mismo que en sede policial.
Cabe recordar que el expolicía de 51 años está imputado del supuesto delito de "privación ilegítima de la libertad".
Los resultados de la pericia de la Policía Judicial sobre el vehículo de Orellano serán clave para definir su futuro procesal. Se espera que esto ocurra antes de fin de mes.
Por su parte, tal como informa La Mañana, el abogado local Horacio Baleani, que asiste a la familia Bortot, indicó a este diario que se deberá aguardar el cruce de declaraciones que realiza el fiscal a partir de esta indagatoria.
En tanto, desde la defensa -encarada por los doctores Miguel Barovero y Francisco Lavisse- destacaron que en el expediente figura una charla que mantuvo con una de las hijas de la mujer desaparecida. E incluso su colaboración en la búsqueda de Bortot.
Finalmente, se había reforzado la vigilancia al cauce del río Calamochita y parte del Carcarañá, luego que un pescador declarara que había encontrado un cuerpo flotando en el río, pero se asustó y lo dejó ir, pero aún no hay encontrado nada.