Números que asustan: ¿cuántos celulares se roban por hora en Argentina?
En el último año, en Capital Federal y provincia de Buenos Aires se desbarataron más de 20 predios que llevaban adelante este negocio espurio.
Unos 228 teléfonos celulares son robados cada hora en todo el territorio argentino, muchos de ellos en episodios donde los damnificados terminan lastimados, según lo reveló un estudio.
El trabajo, titulado como "El Mercado Celular Argentino" y elaborado por la consultora Carrier y Asociados, destacó que las líneas activas durante 2012 treparon a los 37 millones de aparatos en uso, mientras que las compañías del sector revelaron en su balance anual que hay 58,5 millones de líneas activas.
En ese marco, Enrique Carrier, director del estudio, expresó en declaraciones a Diario Popular que "en el último informe no se profundizó la problemática de los robos de equipos, sin embargo sabemos que en 2012 la situación se mantuvo en términos similares al 2011, es decir con unos 2.000.000 de aparatos sustraídos de diversas formas".
El dato establece que por día se roban 5.479 equipos, a un promedio de 228 cada hora. La masividad de los teléfonos inteligentes y sus conexiones a internet a través de la redes 3G derivan en que las personas que usan transportes públicos utilicen en todo momento sus equipos y así, la concentración es la mejor amiga de los delincuentes.
Mientras en los colectivos arrasa el estilo "piraña", en los trenes la modalidad conlleva otra operatoria. Así lo explica Manuel Farías, que viaja en la línea Sarmiento desde Ciudadela hasta Once. "Se mueven siempre de a dos. En Flores o Caballito hacen que bajan, uno simula demorarse, entonces el primero traba la puerta con la formación en movimiento. En esos segundos el segundo sujeto arrebata un teléfono y sale corriendo.
El otro baja, la puerta se cierra y no hay nada que hacer", explicó. Los análisis de Carrier determina el segmento de usuarios de celulares más golpeado por los robos. "El tipo de usuario que más sufre los hechos delictivos son los jóvenes, en un 35% aproximadamente", comentó el especialista, precisando que "la penetración dentro de ese segmento es enorme".
Los que conocen el mercado negro de los celulares explican que las bandas que ponen en funcionamiento los aparatos robados cuentan con software de última generación, en verdaderos laboratorios donde los teléfonos llegan para ser clonados y casi de inmediato ofrecidos en locales a menor precio.
En el último año, en Capital Federal y provincia de Buenos Aires se desbarataron más de 20 predios que llevaban adelante este negocio espurio. Sin embargo, el flagelo continúa. Se calcula que en el área metropolitana funcionan más mil cuevas para venden estos celulares.
El trabajo, titulado como "El Mercado Celular Argentino" y elaborado por la consultora Carrier y Asociados, destacó que las líneas activas durante 2012 treparon a los 37 millones de aparatos en uso, mientras que las compañías del sector revelaron en su balance anual que hay 58,5 millones de líneas activas.
En ese marco, Enrique Carrier, director del estudio, expresó en declaraciones a Diario Popular que "en el último informe no se profundizó la problemática de los robos de equipos, sin embargo sabemos que en 2012 la situación se mantuvo en términos similares al 2011, es decir con unos 2.000.000 de aparatos sustraídos de diversas formas".
El dato establece que por día se roban 5.479 equipos, a un promedio de 228 cada hora. La masividad de los teléfonos inteligentes y sus conexiones a internet a través de la redes 3G derivan en que las personas que usan transportes públicos utilicen en todo momento sus equipos y así, la concentración es la mejor amiga de los delincuentes.
Mientras en los colectivos arrasa el estilo "piraña", en los trenes la modalidad conlleva otra operatoria. Así lo explica Manuel Farías, que viaja en la línea Sarmiento desde Ciudadela hasta Once. "Se mueven siempre de a dos. En Flores o Caballito hacen que bajan, uno simula demorarse, entonces el primero traba la puerta con la formación en movimiento. En esos segundos el segundo sujeto arrebata un teléfono y sale corriendo.
El otro baja, la puerta se cierra y no hay nada que hacer", explicó. Los análisis de Carrier determina el segmento de usuarios de celulares más golpeado por los robos. "El tipo de usuario que más sufre los hechos delictivos son los jóvenes, en un 35% aproximadamente", comentó el especialista, precisando que "la penetración dentro de ese segmento es enorme".
Los que conocen el mercado negro de los celulares explican que las bandas que ponen en funcionamiento los aparatos robados cuentan con software de última generación, en verdaderos laboratorios donde los teléfonos llegan para ser clonados y casi de inmediato ofrecidos en locales a menor precio.
En el último año, en Capital Federal y provincia de Buenos Aires se desbarataron más de 20 predios que llevaban adelante este negocio espurio. Sin embargo, el flagelo continúa. Se calcula que en el área metropolitana funcionan más mil cuevas para venden estos celulares.