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Nuevo escándalo para David Copperfield: el mago ahora se enfrenta a otra demanda

Esta vez por un penthouse abandonado en un edificio en Manhattan. La junta del Galleria asegura que el ilusionista no se ha hecho cargo de los severos daños ocasionados en diferentes incidentes presentados en su propiedad desde que la abandonó abruptamente en 2018.


El famoso mago David Copperfield fue demandado por la junta de un lujoso condominio en Midtown Manhattan, que lo acusa de negligencia por dejar su penthouse de 7 millones de dólares en un estado deplorable que podría comprometer la integridad estructural del edificio.

La junta del Galleria está pidiendo a Copperfield que repare los severos daños ocasionados en diferentes incidentes, atribuyéndolos a la desidia del mago, quien abandonó abruptamente la unidad en 2018. La Suprema Corte de Manhattan recibió la demanda el martes 6 de agosto, según confirmó el New York Post.

La demanda de 2,5 millones de dólares asegura que múltiples incidentes han dejado el edificio en una situación crítica. Entre estos, destaca el fracaso del sistema de fontanería utilizado en la piscina del ático en 2015, cuando una tubería de plástico “ilegal e ineficaz” reventó, ocasionando grandes daños en los apartamentos situados 30 pisos más abajo.

De acuerdo con el mismo medio, en diciembre del año pasado, otro incidente agravó la situación: una válvula falló en la unidad abandonada, provocando otra inundación que dañó los ascensores, pasillos y otros departamentos del edificio de 55 pisos en la calle 57 Este.

“En lugar de salir de manera segura y ordenada, Copperfield dejó la unidad en ruinas”, se lee en la denuncia. Desde entonces, el apartamento ha permanecido abandonado y se encuentra en un estado de deterioro total, con paredes desmoronadas, techos colapsados y pisos manchados.

“De hecho, los arquitectos han advertido a la Condominium que, entre otras cosas, el apartamento de Copperfield contiene daños por agua sin reparar que son tan severos que presentan riesgos para la estructura de concreto del edificio, facilitando el crecimiento de moho y hongos, y poniendo en peligro otros apartamentos”, agrega el documento.

A pesar de las advertencias y la demanda presentada por el abogado de la junta, Joshua Stricoff, Copperfield ha hecho caso omiso, limitándose a reparaciones superficiales. “Las fotos en la demanda hablan por sí mismas y no requieren mayor explicación”, afirmó Stricoff al New York Post, el medio que reveló la información. Con estas pruebas, la junta espera que Copperfield “haga lo correcto tanto por el edificio como por su unidad”.

En respuesta, un representante del mago calificó los problemas como “un reclamo de seguro simple” y alegó que las fotografías incluidas en la misma no reflejan el estado actual del apartamento. “Esto es un asunto judicial y se manejará en la corte“, señaló en un correo electrónico enviado el miércoles 7 de agosto.

El penthouse, que Copperfield compró en 1997 por 7.4 millones de dólares y luego transfirió a una fachada de empresa, cuenta con 1.393 metros cuadrados y vistas de Central Park y el Upper East Side. Originalmente en perfectas condiciones, el espacio fue decadentemente decorado por el mago, que incluyó una colección ecléctica de objetos insólitos como una “silla sorpresa” de 100 años, juegos de arcade antiguos, maniquíes, una “mesa explosiva” y escaleras que se convierten en tobogán.

Un vecino identificado como Elliot y con residencia en el edificio desde 1976, aseguró haber conocido a Copperfield brevemente en el ascensor y afirmó que, si bien no se vio afectado por las inundaciones, las unidades de vidrio del condominio “siempre tienen filtraciones” y sugirió que se necesitan alrededor de “20 millones de dólares” para reparar adecuadamente el edificio. “Aquí cada uno es responsable de su propio apartamento“, dijo Elliot, agregando que había escuchado esto de parte del personal de mantenimiento del edificio.

El deterioro del penthouse no sólo afecta a la estructura del edificio, sino que también supone riesgos para la salud de los residentes debido a la presencia de moho y hongos. La junta del Galleria subraya que la falta de mantenimiento ha sido agravada desde que Copperfield despidiera a su personal de mantenimiento al abandonar la unidad.

En los últimos meses, Copperfield se ha enfrentado a otros problemas legales. En mayo, fue acusado de conducta sexual inapropiada por 16 mujeres, algunas de las cuales afirmaron ser menores de edad o haber sido drogadas en el momento de los incidentes. Copperfield ha negado todas las acusaciones.

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