Nueva jornada sofocante en la Ciudad: se esperan máximas de 37 a 39 grados y rige el alerta roja 

El Servicio Meteorólogico Nacional (SMN) volvió a pronosticar un nuevo fin de semana sofocante. En medio de la novena ola de calor del año, la alerta roja por las altas temperaturas continúa en la Ciudad de Buenos Aires y alrededores, donde las lluvias seguirán ausentes y el sistema eléctrico de la región parece no dar a basto. Para este sábado, la sensación térmica podría llegar a posicionarse de nuevo por encima de los 40° C, tal como sucedió ayer por la tarde.

Quien pueda que se refresque en una pileta, y el que no, que espere a tener luz al llegar a su casa. Ni los ventiladores ni los aires acondicionados parecen ser suficientes para aliviar el calor. Desde el SMN señalan que la situación -que también afecta a varias localidades del centroeste del país- es “anómala” y agregan que es causada por un patrón de circulación semiestacionario, de bloqueo atmosférico, que impide el ingreso de aire más frío a la región.

Este sábado, el pronóstico indica que las máximas oscilarán entre los 37 y los 38° C en Buenos Aires, cerca de la marca alcanzada el pasado 2 de marzo. “No se descarta que vuelva a quebrarse un récord histórico con poca diferencia de días, lo que da cuenta de lo anómala que es la situación. La sensación térmica seguramente supere los 40 °C en algunos momentos de la tarde, como pasó ayer”, explicó el meteorólogo del SMN, Christian Garavaglia en diálogo con Infobae.

“El calor en mayor o menor medida continuará una semana más al menos. Este fin de semana probablemente se den las marcas más altas, de 37 a 39 °C en la región. A partir del martes habrá mayor humedad e inestabilidad, con chance de tormentas aisladas a lo largo de los días y temperaturas que seguirán siendo calurosas pero probablemente más bajas, del orden de 30 a 34 °C”, explicó.

Según señaló el especialista, recién a partir del próximo fin de semana podría ingresar un sistema frontal (una zona de transición entre dos masas de aire de diferente temperatura) “más definido”, con precipitaciones más generalizadas.

“Depende de cuánto pueda avanzar es el grado de descenso térmico que tendremos. Hay un poco de incertidumbre aún en ese pronóstico a tantos días”, detalló Garavaglia.

Frente a las elevadas temperaturas, la demanda de electricidad cada vez crece más: ayer, mientras el termómetro en la Ciudad de Buenos Aires marcaba los 37.7 grados y la sensación térmica superaba los 41, el consumo en todo el país alcanzó su récord histórico y llegó a los 28.562 MW. De esta forma, se ubicó por encima del récord anterior para un día hábil de 28.283 MW ocurrido el 6 de diciembre pasado, según los datos suministrados por Cammesa, la empresa mayorista de electricidad.

Con el correr de las horas, la demanda extrema comenzó a disminuir paulatinamente y sobre las 17.00 aún se encontraba en 27.800 MW, presionando sobre la estabilidad del Sistema Argentino de Interconexión (SADI), que genera la electricidad para todo el país a excepción de Tierra del Fuego.

En este contexto, uno de los mayores problemas que preocupa a los argentinos son los cortes de luz. Para las 8.45 de la mañana, de acuerdo a información del Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE), se informaron más de 16 mil cortes de luz en diversas zonas del área metropolitana de Buenos Aires. Las mayores afecciones las presenta la empresa Edesur, en barrios como Floresta, Villa Lugano, Mataderos, Recoleta, Almagro y Villa Riachuelo. Por su parte, la firma Edenor registra cortes en Parque Chas, Colegiales, Belgrano, Coghlan y parte de Villa Urquiza.


El calor, en rojo

La alerta roja, que advierte por los efectos extremos que las altas temperaturas podrían tener en la salud de la población, rige desde ayer para todo territorio porteño y los partidos bonaerenses de Almirante Brown, Avellaneda, Berazategui, Florencio Varela, Lanús, Lomas de Zamora, Presidente Perón y Quilmes. A estas localidades también se suman Berisso, Ensenada, La Plata, Brandsen, Cañuelas, San Vicente, Esteban Echeverría, La Matanza, Ezeiza y Merlo, donde el viernes se registró la temperatura más alta de todo el país cuando la sensación térmica tocó los 44.1 grados en horas de la tarde. De igual forma, la capital federal también alcanzó máximos sofocantes al informar 41,2 grados.

A su vez, el SMN emitió una alerta naranja para algunas zonas del norte de la provincia de Buenos Aires como Morón, Moreno, Las Heras, General Rodríguez, San Andrés de Giles, Escobar, San Fernando, Tigre, Vicente López, Luján, Marcos Paz, San Isidro, General San Martin, Hurlingam, Ituzaingó, José C. Paz, entre otras. La misma alarma está establecida para Entre Ríos en Gualeguaychú, Ibicuy, Diamante, Nogoyá y La Paz y en la provincia de Corrientes, en General Alvear, Paso de los Libres, Santo Tomé, Concepción y Curuzú Cuatiá.

En cambio, para el resto de la provincia de Buenos Aires; norte y sur de Entre Ríos, sureste de Santiago del Estero, zona montañosa de Catamarca, Tucumán, sudeste de Santiago del Estero, norte de La Pampa, norte y sur de San Luis, noreste de Chubut y oeste de Corrientes, Santa Fe y Córdoba rige una alerta amarilla -donde el efecto por el calor es de leve a moderado- por temperaturas que rondarán entre los 34 y 38 grados.

Frente a esto, el Ministerio de Salud de la Nación emitió una serie de consejos para evitar descompensaciones durante una ola de calor y alertó que los efectos podrían ir desde deshidratación, complicaciones, hasta un aumento de la mortalidad.

“Se recomienda especial cuidado con personas mayores, bebés, niños y niñas, personas embarazadas y en lactancia, personas con alguna enfermedad crónica o con sobrepeso, personas expuestas al calor en su ambiente laboral, quienes viven en situación de calle, y aquellas personas que consideren que pueden estar más expuestas por el impacto de la ola de calor. En este sentido, se sugiere que se tomen algunas precauciones necesarias según el caso”, expresaron.

Las recomendaciones en lugares cerrados (casa, trabajo, u otro) para evitar un golpe de calor son: hidratarse, tomar agua con mayor frecuencia (aun cuando no se sienta sed), y procurar siempre consumir agua segura, evitar bebidas con cafeína o con azúcar en exceso, muy frías o muy calientes. También, se sugiere incorporar frutas y verduras a la alimentación y evitar las comidas abundantes, así como la realización de actividad física intensa.

En la vía pública, el organismo nacional recomendó evitar la exposición directa al sol en los horarios de mayor temperatura (de 10 a 16 horas), en especial bebés, niñas y niños pequeños; utilizar protección solar, mantenerse hidratado y consumir agua segura con mayor frecuencia (incluso cuando no se sienta sed).

Asimismo, se aconseja prestar atención a signos como: sed intensa y sequedad en la boca, temperatura corporal mayor a 39º C, sudoración excesiva, sensación de sofocación, piel seca, agotamiento, mareos o desmayo, dolores de estómago, falta de apetito, náuseas o vómitos, y dolores de cabeza, entre otros.