"No quiero conocer a mi hijo"... ¿No lo pensaste al concebirlo, Luppi?
El actor se suma a la lista de famosos que no reconocen su paternidad y creen que el "problema" se soluciona pasando plata a las madres.
Quizás el caso más mediático sea el de Diego Armando Maradona, pero pareciera que su apellido pesa más que la atrocidad de no querer reconocer a Diego Junior, y por eso la sociedad no lo bastardea tanto. Sin embargo, ya es hora –nunca es tarde para cambiar, dicen- de entender que estas actitudes son repudiables, venga de quien venga.
Luppi, el actor que volvió de España a Argentina hace tres años, después de que en el país europeo estallara la crisis económica y le cortaran los subsidios, tiene dos hijos de los que suele hablar. Pero también tiene a Leonardo, de 13 años, a quien reconoció al nacer, pero que no conoce ni quiere conocer en persona, aun siendo consciente del daño que le puede causar.
"Lleva mi apellido y tenemos un convenio por el cual le paso una mensualidad. Cada vez que puede, la madre del chico sale a pegarme. Pero yo estoy haciendo las cosas bien no tengo nada que esconder", dijo. Si no tiene nada que esconder, ¿por qué se esconde del principal damnificado: su hijo? Me vuelvo a preguntar: ¿qué sentido tiene reconocer a un hijo, darle un apellido, si no se ayuda en su crianza en lo más mínimo?
Señor Luppi, si no tomó las precauciones al consumar el acto sexual, ¿por qué culpa a su "efímera" amante? "No fuimos pareja. Tuvimos sexo un fin de semana (...) Ella me dijo que se cuidaba, y a los tres meses me llamó para decirme que estaba embarazada", declaró el actor, quien da un muy mal ejemplo, porque deja entrever que el preservativo sólo se usa para evitar un embarazo, sin tener en cuenta la posibilidad de contraer una enfermedad.
"Me siento estafado. Todavía debo procesar esa rabia. Hay responsabilidades que tienen que ver con la adultez. Siento que tengo que mantener a una mina que, encima, no trabaja", declaró el señor Luppi. ¿Responsabilidades que tienen que ver con la adultez? Eso es lo que le falta a alguien que responde así ante la paternidad. Cabe resaltar que en una porción muy grande de familias con hijos, los padres se separan, pero no es necesario culpar a los hijos por esto. ¿Estafado, dice? Las cuentas de los adultos, se pagan entre adultos.