¡No pudo evitar a su suegra!
Antes de estrenar su filme "W.E" en el Festival de Cine de Venecia. Madonna conoció a la mamá de Brahim Zaibat, el bailarín francés de 24 años con quien sale desde hace un año.
Ni Madonna pudo escaparle a la temida suegra.
Después de un año de relación con el bailarín francés de 24 años, Brahim Zaibat, a la reina del pop no le quedó otra que aceptar la invitación de la mamá de su pareja, Patricia Vidal.
La cantante, que el pasado 16 de agosto celebró su cumpleaños número 53 en Nueva York, y su joven novio se conocieron en septiembre del año pasado cuando este bailó hip hop en el lanzamiento de Material Girl, la marca de indumentaria de la ex del modelo brasilero Jesús Luz.
La relación lleva un año y, al parecer, todo sigue de maravillas entre ellos. Es por eso que la diva accedió a viajar al sur de Francia para, entre otras cosas, conocer a su suegra.
Antes de volver al trabajo y aprovechando el último tramo del verano europeo, la celebrity internacional se tomó unas mini vacaciones. Madonna y sus tres hijos, Lourdes, Rocco y David, se hospedaron el lujoso hotel Eden Roc, ubicado en Cap d’Antibes.
De esta manera, mientras los chicos disfrutaron del mar, anduvieron en lancha, en moto de agua, navegaron en jet sky, los novios compartían caminatas, clases de surf y circuitos en bicicleta, siempre muy acaramelados.
Lo cierto es que una tarde, al caer el sol, llegó el momento cúlmine: "Mamá, te presento a mi novia", le dijo sobre un muelle el bailarín a la mujer que lo vio nacer.
Acto seguido apareció en escena la reina del pop. Se saludaron amigablemente, charlaron , compartieron unas comidas y, en la primera impresión, la diva consiguió el visto bueno de Patricia, que como toda madre, cuestionó la diferencia de edad y la religión (su hijo es musulmán y la rubia sigue al cábala).
De todas maneras, el encuentro familiar duró poco, ya que el jueves 1º de septiembre, Madonna debió viajar al Festival Internacional de Cine de Venecia, donde estrenó "W.E.", su segunda película como directora.
A la flamante cineasta se la vio radiante pero, esta vez, las críticas de la prensa no la ayudaron.
La reina del pop llevó a la pantalla grande una historia de amor protagonizada por Andrea Riseborough y Abbie Cornish, que se basa en la vida de la estadounidense Wallis Simpson, cuyo romance con el rey Eduardo VIII llevó a su abdicación.
Si bien Madonna estaba fascinada con el sacrificio que un hombre hizo por amor, las criticas de los especialistas, no fueron las mejores.
Por suerte, la diva del pop, tiene quien la contenga y consuele.