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"No me asusta ser bipolar"

Zeta-Jones desdramatiza su enfermedad

Su vida transcurría sin mayores sobresaltos hasta que 2010 golpeó duro a la actriz Catherine Zeta-Jones (41) cuando tuvo que lidiar con el cáncer de garganta que casi le cuesta la vida a su marido, Michael Douglas (66). El doloroso tratamiento se tradujo en una desmejorada imagen del actor y en una profunda depresión de la actriz. Finalmente, el tratamiento de Douglas dio buenos resultados y la pareja fue retomando su vida con renovadas energías. Sin embargo, este año le tocó el turno a ella para enfrentar sus propios límites.

El estrés que le provocó la enfermedad de su esposo despertó en la actriz galesa un desorden bipolar, y decidió hospitalizarse durante cinco días en una clínica privada. A pesar de la dura batalla que enfrenta, Catherine desdramatiza su enfermedad y enfrenta la cruda realidad. "No me asusta ser bipolar", declaró la bella mujer, contenida por el amor de Michael y sus hijos, Dylan (10) y Carys (7).

"Esta enfermedad no me impide seguir con mi carrera ni vivir a pleno mis afectos", confesó la actriz que acaba de filmar junto a Tom Cruise, "Rock of ages".

Para descomprimir las tensiones, el matrimonio decidió realizar un romántico crucero por la costa italiana, donde Jones lució una bikini marrón demostrando que las curvas con las que conquistó Hollywood siguen intactas. La pareja enamorada recorrió las calles de la localidad de Portofino, cercana a Génova, e hicieron unas compras en la famosa plaza "Piazzetta", el centro comercial donde se encuentran todas las grandes marcas. Lejos del glamour, Catherine se relajó y lució un descontracturado look como cualquier turista. La morocha se mostró con un discreto vestido color crema, sandalias y una canchera bandana que completó con gafas oscuras. Michael, más formal, lució camisa celeste, pantalones y zapatos aunque puso el toque décontracté con un cup.

"Al mal tiempo buena cara", reza un viejo proverbio, y el matrimonio hollywoodense parece enarbolar como un estandarte esa frase por el mundo.