"No hay ninguna posibilidad de divorcio con la CGT"

El ministro del Interior, Florencio Randazzo, aseguró hoy que "no hay ninguna posibilidad de divorcio" entre el gobierno nacional y la CGT de Hugo Moyano, al señalar que la administración kirchnerista "tomó al trabajador como eje central de sus políticas" desde el inicio de su gestión.

"No debería haber ningún inconveniente porque la Presidenta (Cristina Kirchner) no es imparcial, juega siempre junto a los más débiles", afirmó el funcionario en declaraciones formuladas a un matutino porteño.

En momentos en que la Casa Rosada espera que la CGT acepte negociar una pauta salarial menor a la de años anteriores y no propicie un paro nacional, Randazzo dijo que confía en "que no habrá inconvenientes si los representantes de los trabajadores cumplen su rol".

"Si los dirigentes sindicales son realmente representantes de los trabajadores, no hay ninguna posibilidad de divorcio" entre la CGT y la Casa Rosada, enfatizó Randazzo.

El ministro se expresó de esta forma cuando la relación del Gobierno con la central obrera que lidera el camionero Hugo Moyano atraviesa su peor momento, mientras la CGT mantiene fuertes reclamos a la jefa de Estado, como el reparto parcial de las ganancias empresarias entre los trabajadores.

En los últimos días, allegados al líder camionero reiteraron que la relación con el Gobierno pasa por un momento "difícil" y hablaron de "diferencias políticas" entre Cristina Kirchner y el jefe de la central trabajadora.

La tensión entre Moyano y la administración nacional se acrecienta a medida que se acerca la fecha en la que al actual titular de la central se le vence el mandato al frente de la institución: en junio próximo.

Si bien no hubo una confirmación formal, el Gobierno ya dio señales sobre que para esa contienda respaldará a otro referente sindical, que podría ser del sector de los denominados "Gordos", enfrentados a Moyano.