Murió Enrique Morea, uno de los símbolos del tenis argentino
Entre 1948 y 1958 fue jugador y capitán de la Davis. Luego presidió la AAT. Tenía 92 años.
El ingeniero Enrique Morea falleció esta mañana en Buenos Aires a sus 92 años. Fue uno de los mejores jugadores de la historia del tenis argentino para luego erigirse como presidente de la AAT durante cinco mandatos hasta que en 2010 fue designado como presidente honorario del organismo.
"Te juro que con esto, ya cumplí mi objetivo de vida en el tenis", dijo Enrique Morea cuando, sentado en su casa frente a la TV, vio cómo Federico Delbonis le ganaba a Ivo Karlovic el último punto de la serie de la Copa Davis 2016 que Argentina ganó por primera vez en su historia.
Historia de la que Morea fue parte vital. Entre 1946 y 1966 fue el mejor tenista argentino y de Sudamérica sin interrupción. Fue también dos veces semifinalista en singles de Roland Garros y campeón de doble mixto en París en 1950. Como jugador ocupó también un rol clave en la historia de la Copa Davis: entre 1948 y 1958 fue capitán y jugador.
Allá por 1955 fue considerado como uno de los 10 mejores tenistas del mundo pero entonces no existía el ránking mundial, por lo que no hubo registro de su clasificación.
En 1973 se transformó por primera vez en presidente de la Asociación Argentina de Tenis (AAT), cargo que ocupó hasta 1979.
Luego tuvo otros cuatro períodos al frente del organismo que rige el tenis nacional: 1997-2001, 2001-2005, 2005-2009 y 2009-2014.
También se destacó como árbitro general de Copa Davis en tres finales:Rumania-Estados Unidos, 1972, en Bucarest; Italia-Chile, 1976, en Chile; y Estados Unidos-Italia, 1979, en San Francisco.
Morea ocupó además cargos en la Federación Internacional de Tenis: fue, entre otras cosas, vicepresidente del máximo organismo mundial del deporte entre 1977 y 1979 y fue reconocido como consejero honorario de por vida desde 1993.
El ingeniero tenía su lugar en el Salón Internacional de la Fama como miembro del panel de votación y miembro del panel internacional.
Morea forjó estrechas relaciones con los tenistas argentinos pero tuvo con Juan Martín Del Potro un afecto especial. El tandilense le regala su camiseta luego de cada final de la Copa Davis e incluso lo visitaba con frecuencia y estuvo presente en la ceremonia en la que fue reconocido como figura de la AAT.