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Moria Casán-Sofía Gala: Los trapitos se lavan en casa

Tienen una relación compleja desde siempre. Ambas verborrágicas, no suelen quedarse calladas. ¿Realidad o ficción?

El feriado estaba tranquilo, hasta que estalló la guerra entre Moria Casán y Sofía Gala. Mientras la madre pedía el despido de su hija del programa "Malas muchachas", de C5N, en un móvil por El Trece, la hija se quejaba de las malas actitudes de la diva hacia con ella.

Que la relación entre madres e hijas es compleja, ya es algo más que sabido, y sucede en todas las familias. Celos, límites y una cierta competencia entre ambas es algo normal en el crecimiento entre las adolescentes y sus madres. Pero es una etapa que se vive hasta que se emparejan en edad y ambas viven la adultez.

En algunas ocasiones, esta tensa relación se mantiene aún cuando ambas ya son adultas. Pero bien distinto es que esto suceda en un hogar común como el de cualquiera de nosotros, y otra cosa es que esto pase en una familia con alto perfil público.

Moria es un estereotipo de mujer que rompe con todas las reglas, y su hija es una buena aprendiz de este estilo de vida. Ambas dicen lo que piensan y no se detienen ante los límites marcados por la sociedad. Pero Moria quizás es quien mejor conoce el juego, y a pesar de tener ese ímpetu ante la vida, es bien conocida en el medio por su respeto y profesionalidad ante el trabajo y sus compañeros. Sofía, por el contrario, suele tener un comportamiento más "infantil" a la hora de emprender una labor profesional.

Pero que las peleas traspasen la pantalla no es algo positivo. Siendo una familia que su vida entera transcurrió en los medios, y que ambas saben manejar los códigos de la prensa, es bastante extraño que un conflicto entre ellas haya llegado al público.

Un escándalo que pasó todas las discusiones que tuvo Moria en la TV. Quien supo pelearse y reconciliarse en cámara con varios de sus exmaridos, hoy le tocó enfrentarse con su hija. Y fue ella quien lo expuso: la propia Moria lo hizo público, la propia madre pidió el despido de Sofía Gala, y hasta puso en jaque a la producción al reclamar "es ella o yo".

Y mientras los productores deciden cómo resolver este conflicto, y desde los medios no dejamos de hablar de ellas dos, madre e hija se deben un diálogo en privado para que la próxima vez, los trapitos se laven en casa.

¿O será que el escaso rating que el programa supo conseguir generó este extraño conflicto, de la que ninguna de las panelistas quedó afuera, y del que todas opinaron?