Misterio en Dock Sud: el cadáver que cumplió 500 días sin que nadie lo busque
Un cuerpo fue encontrado sin vida flotando en el arroyo Sarandí el 13 de mayo de 2014 con las manos esposadas. No pudieron averiguar quién es la víctima luego de quinientos días.
El hombre apareció en Dock Sud, y tras un llamado al 911, los investigadores concurrieron al lugar donde flotaba el cuerpo, a 100 metros de la autopista Buenos Aires - La Plata. La víctima tenía la cabeza envuelta en papel film y sus manos atadas en su espalda con esposas que tienen la numeración limada.
La Justicia intentó identificarlo de diversas formas. Sin testigos del descarte, cuando quisieron sacar el papel film de su cara, la piel se salía de la misma, por el avanzado proceso de descomposición. Por esta razón no se pudo hacer un dibujo de su cara, no se conoce el color de ojos, no tiene tatuajes ni cicatrices, sólo se sabe que tenía entre 30 y 45 años y permanece en una fosa en el cementerio de Avellaneda como NN.
"Sólo se sabe que es un hombre de 1,75 metro, 80 kilos, de pelo negro sin barba ni bigote y que tenía una pulsera de metal con un fileteado en la mano izquierda. Vestía jeans marca 'Dinamix', un chaleco inflable azul 'Nike', un buzo blanco o gris, una remera blanca con la inscripción 'Large' en verde y zoquetes grises, sin calzado", detallaron los investigadores al diario Clarín.
Según el informe de la autopsia, la muerte data entre tres y diez días antes de su hallazgo, es decir entre el 3 y el 10 de mayo de 2014, pero no hay denuncias de desapariciones o averiguación de paradero que coincidan con la descripción.
Las huellas dactilares debieron analizarse especialmente en la Policía Científica de La Plata por el mal estado del cuerpo, si bien pudieron realizar el perfil dactilar, la persona no tenía antecedentes y sus huellas no aparecen en ninguna base de datos.
Sin encontrar respuestas, se pidió a la Dirección Nacional de Migraciones que corrobore su huella dactilar con los extranjeros. Lamentablemente para la Justicia, la entidad sólo puede chequear identidades con nombres.
La Fiscalía decidió recurrir al último recurso posible: intentar encontrar a los asesinos por su modus operandi; por este motivo pidieron a Homicidios que corrobore los datos del caso con otros. Actualmente, se espera el informe para ver si hay coincidencias.