"Mis hijas fueron testigo de la crisis y lo sufrían"
En una entrevista íntima con Pamela David, Jorge Rial volvió a referirse a su separación y profundizó en detalles los motivos de su divorcio.
Jorge Rial volvió a referirse a su separación y reveló: "Pensé en dejar todo porque no tenía más incentivo de nada. Estaba incómodo con todo, todo me molestaba... hasta la mínima estupidez que hoy me divierte, en ese momento me irritaba".
"La verdad es que me levantaba y sabía exactamente cómo iba a ser todo mi día. Era una rutina, me faltaba la sorpresa y esa sorpresa te la trae el amor. Hoy Mariana me divierte, me hace reir y no le veo nada malo a eso", le confesó Jorge Rial a Pamela.
"Es obvio que mi separación no fue algo que yo haya buscado sino todo lo contrario. Uno se casa para toda la vida pero la misma vida te va cambiando y a veces uno confunde cariño con amor", añadió. El conductor explicó que el 'click' en su cabeza se produjo el día que lo operaron para ponerle el sten.
"Puede sonar egoísta pero en ese momento, no pensé ni en mi mujer ni en mis hijas sino en mí. Porque si yo me quedaba en la opración, ahí se iba todo. Tiempo después de cumplir mis 50 años, viajé a Nuevo York y me encontré en un restaurante rodeado por mi mujer y mis hijas y preguntándome qué estaba haciendo ahí", declaró.
Rial dice que su separación marcó un nuevo comienzo para él. "Muchos me decían que me veían mejor. Más tranquilo. Yo venía de un año complicado en el que tenía ganas de largar todo porque no quería saber nada más con nada. No tenía más incentivo. Estaba incómodo con todo, todo me molestaba... hasta la mínima estupidez que hoy me divierte, en ese momento me irritaba".
Sobre su relación con Mariana Antoniale, el conductor dijo: "No siento que tenga que pedir disculpas por nada. No voy a exponer mi relación a la opinión de personas que ya no tienen nada que ver conmigo".
"Hablé con mis hijas que en todo momento fueron testigos de la crisis porque lo vivían y lo sufrían. El día que me dicen que me tengo que ir de casa, hablé con ellas".
"El primero que supo lo de Mariana fue un amigo mío que se llama Beto. Él nos invitó a mis hijas y a mí al campo. Estabamos sólos y tenía necesidad de hablarlo con alguien. Él me dijo que me veía bien y que le diera para adelante". La pregunta obvia no tardó en llegar, ¿Luis Ventura estaba al tanto de esta relación? La respuesta fue directa: no.
"A Ventura se lo conté casi a último momento porque nos conocía a los dos desde el principio y no quería que quede en el medio de un reproche del estilo 'lo sabías y no me dijiste'. Lo quise preservar"
"La verdad es que me levantaba y sabía exactamente cómo iba a ser todo mi día. Era una rutina, me faltaba la sorpresa y esa sorpresa te la trae el amor. Hoy Mariana me divierte, me hace reir y no le veo nada malo a eso", le confesó Jorge Rial a Pamela.
"Es obvio que mi separación no fue algo que yo haya buscado sino todo lo contrario. Uno se casa para toda la vida pero la misma vida te va cambiando y a veces uno confunde cariño con amor", añadió. El conductor explicó que el 'click' en su cabeza se produjo el día que lo operaron para ponerle el sten.
"Puede sonar egoísta pero en ese momento, no pensé ni en mi mujer ni en mis hijas sino en mí. Porque si yo me quedaba en la opración, ahí se iba todo. Tiempo después de cumplir mis 50 años, viajé a Nuevo York y me encontré en un restaurante rodeado por mi mujer y mis hijas y preguntándome qué estaba haciendo ahí", declaró.
Rial dice que su separación marcó un nuevo comienzo para él. "Muchos me decían que me veían mejor. Más tranquilo. Yo venía de un año complicado en el que tenía ganas de largar todo porque no quería saber nada más con nada. No tenía más incentivo. Estaba incómodo con todo, todo me molestaba... hasta la mínima estupidez que hoy me divierte, en ese momento me irritaba".
Sobre su relación con Mariana Antoniale, el conductor dijo: "No siento que tenga que pedir disculpas por nada. No voy a exponer mi relación a la opinión de personas que ya no tienen nada que ver conmigo".
"Hablé con mis hijas que en todo momento fueron testigos de la crisis porque lo vivían y lo sufrían. El día que me dicen que me tengo que ir de casa, hablé con ellas".
"El primero que supo lo de Mariana fue un amigo mío que se llama Beto. Él nos invitó a mis hijas y a mí al campo. Estabamos sólos y tenía necesidad de hablarlo con alguien. Él me dijo que me veía bien y que le diera para adelante". La pregunta obvia no tardó en llegar, ¿Luis Ventura estaba al tanto de esta relación? La respuesta fue directa: no.
"A Ventura se lo conté casi a último momento porque nos conocía a los dos desde el principio y no quería que quede en el medio de un reproche del estilo 'lo sabías y no me dijiste'. Lo quise preservar"