Ministros Exteriores del Golfo piden a la ONU que proteja al pueblo libio
En su discurso, el titular de Exteriores emiratí, Abdalá bin Sayed al Nahian, hizo un llamamiento a "la comunidad internacional, especialmente al Consejo de Seguridad, para que asuma sus responsabilidad históricas para proteger al pueblo querido".
Los ministros de Asuntos Exteriores del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) pidieron hoy al Consejo de Seguridad de la ONU que proteja al pueblo libio de los sucesos violentos que atraviesa el país.
En su discurso, el titular de Exteriores emiratí, Abdalá bin Sayed al Nahian, hizo un llamamiento a "la comunidad internacional, especialmente al Consejo de Seguridad, para que asuma sus responsabilidad históricas para proteger al pueblo querido".
"Los cambios duros por los que está atravesando el hermano pueblo libio necesitan aunar esfuerzos para apoyarlo en su dificultad", señaló durante la reunión ministerial 118 de los países del Consejo en Abu Dabi.
Por su parte, el secretario general del CCG, Abdelrahman al Ateya, expresó su deseo de que "se acabe la pesadilla que controla a un país como Libia", donde el líder Muamar el Gadafi trata de reprimir por la fuerza a la rebelión contra su régimen.
"Las masacres que comete el régimen contra los ciudadanos suponen un crimen contra la humanidad que merece la condena, especialmente porque el régimen libio recurre a los mercenarios y a las armas pesadas en una peligrosa violación de los derechos humanos", agregó.
Para Al Ateya, proteger y garantizar la seguridad de los ciudadanos libios supone "una prioridad máxima en esta etapa crítica".
El secretario general del CCG expresó su rechazo a cualquier forma de intervención extranjera en los asuntos libios y reafirmó su compromiso con mantener "la unidad nacional del pueblo libio, su soberanía e integridad territorial".
En cuanto a la situación en los países del golfo Pérsico, en concreto en Omán y Baréin, el titular de Exteriores emiratí aseguró que las circunstancias regionales obligan a todos a "apoyar la cooperación e intentar conseguir logros tangibles que puedan servir a los intereses de los ciudadanos".
"Confiamos en la capacidad del sultán Qabus bin Said (de Omán) en tratar estos asuntos con toda sabiduría y eficacia y somos conscientes de que el destino de nuestros países y pueblos es común", dijo.
"Lo que les pasa a nuestros hermanos nos pasa a nosotros también, ya que nuestra seguridad y nuestro futuro son comunes", añadió Al Nahian.
También destacó los esfuerzos "sabios" del monarca bareiní, el jeque Hamad bin Isa al Jalifa, para aplacar las manifestaciones que suceden en su país, ya que ha puesto "el interés bareiní y de su pueblo por encima de todo".
En su discurso, el titular de Exteriores emiratí, Abdalá bin Sayed al Nahian, hizo un llamamiento a "la comunidad internacional, especialmente al Consejo de Seguridad, para que asuma sus responsabilidad históricas para proteger al pueblo querido".
"Los cambios duros por los que está atravesando el hermano pueblo libio necesitan aunar esfuerzos para apoyarlo en su dificultad", señaló durante la reunión ministerial 118 de los países del Consejo en Abu Dabi.
Por su parte, el secretario general del CCG, Abdelrahman al Ateya, expresó su deseo de que "se acabe la pesadilla que controla a un país como Libia", donde el líder Muamar el Gadafi trata de reprimir por la fuerza a la rebelión contra su régimen.
"Las masacres que comete el régimen contra los ciudadanos suponen un crimen contra la humanidad que merece la condena, especialmente porque el régimen libio recurre a los mercenarios y a las armas pesadas en una peligrosa violación de los derechos humanos", agregó.
Para Al Ateya, proteger y garantizar la seguridad de los ciudadanos libios supone "una prioridad máxima en esta etapa crítica".
El secretario general del CCG expresó su rechazo a cualquier forma de intervención extranjera en los asuntos libios y reafirmó su compromiso con mantener "la unidad nacional del pueblo libio, su soberanía e integridad territorial".
En cuanto a la situación en los países del golfo Pérsico, en concreto en Omán y Baréin, el titular de Exteriores emiratí aseguró que las circunstancias regionales obligan a todos a "apoyar la cooperación e intentar conseguir logros tangibles que puedan servir a los intereses de los ciudadanos".
"Confiamos en la capacidad del sultán Qabus bin Said (de Omán) en tratar estos asuntos con toda sabiduría y eficacia y somos conscientes de que el destino de nuestros países y pueblos es común", dijo.
"Lo que les pasa a nuestros hermanos nos pasa a nosotros también, ya que nuestra seguridad y nuestro futuro son comunes", añadió Al Nahian.
También destacó los esfuerzos "sabios" del monarca bareiní, el jeque Hamad bin Isa al Jalifa, para aplacar las manifestaciones que suceden en su país, ya que ha puesto "el interés bareiní y de su pueblo por encima de todo".