"Me esperó para morirse"
La histórica perra Dominga murió el miércoles y Anabela Ascar compartió su dolor esta mañana con "Chiche" Gelblung.
"Estoy más o menos. A mí me cambió, algo me pasó internamente, me siento desorientada y perdida, sobre todo en los hábitos. Los sábados a la mañana me despertaba a tomar mate... cuando uno tiene actividades con la mascota es difícil", señaló Anabela Ascar, en diálogo en "Hola Chiche", tras la pérdida de su perra Dominga, emblemática mascota de Crónica TV.
"De todas maneras, se sabe que un perro no puede durar 18 años pero me quede vacía. Dominga se murió el miércoles a las 11 de la mañana. Pero me pasó algo increíble, me esperó para morirse", dijo.
"Yo ya sabía que su aparato digestivo no daba para más y la veterinaria me dijo que en cualquier momento se podía morir. Se quedó en casa pero no se iba, y cada media hora vomitaba. La veterinaria quería internarla, pero era en una jaula. Yo no quería pero gracias a Dios no llegó a la jaula. La interné a las 5 y a las 9 me dijeron que estaba grave. Yo no quería darle una inyección porque me queda culpa. Entonces pedí hablar con ella; estaba toda intubada", sostuvo.
"Le dije `Dominga andate, liberame de darte la inyección, el día que yo tenga que ir esperame en ese portal del otro mundo, la liberé de la angustia de ella, porque los animales a veces no se van por los dueños´. Salí, y a los dos minutos hizo un paro y se fue. Fue como decirme ahora que me liberaste, parto. Hizo un paro y se fue sin ningún tipo de complicación", finalizó la conductora altamente conmocionada.
"De todas maneras, se sabe que un perro no puede durar 18 años pero me quede vacía. Dominga se murió el miércoles a las 11 de la mañana. Pero me pasó algo increíble, me esperó para morirse", dijo.
"Yo ya sabía que su aparato digestivo no daba para más y la veterinaria me dijo que en cualquier momento se podía morir. Se quedó en casa pero no se iba, y cada media hora vomitaba. La veterinaria quería internarla, pero era en una jaula. Yo no quería pero gracias a Dios no llegó a la jaula. La interné a las 5 y a las 9 me dijeron que estaba grave. Yo no quería darle una inyección porque me queda culpa. Entonces pedí hablar con ella; estaba toda intubada", sostuvo.
"Le dije `Dominga andate, liberame de darte la inyección, el día que yo tenga que ir esperame en ese portal del otro mundo, la liberé de la angustia de ella, porque los animales a veces no se van por los dueños´. Salí, y a los dos minutos hizo un paro y se fue. Fue como decirme ahora que me liberaste, parto. Hizo un paro y se fue sin ningún tipo de complicación", finalizó la conductora altamente conmocionada.