DOLAR
OFICIAL $816.08
COMPRA
$875.65
VENTA
BLUE $1.18
COMPRA
$1.20
VENTA

¿Mató a su mujer y a sus hijos?

Un tribunal de Morón dará a conocer hoy el veredicto en el juicio que se sigue a un estadounidense acusado del crimen de su mujer embarazada y de sus dos pequeños hijos, cometido en 2009.

Un tribunal de Morón dará a conocer hoy el veredicto en el juicio que se sigue a un
estadounidense acusado del triple crimen de su mujer embarazada de ocho meses y de sus dos pequeños hijos, cometido en 2009 en una casa de ese partido bonaerense.

El imputado es Antonio Orlando Cajal (29), nacido en Atlanta, Georgia, quien es juzgado por el "doble homicidio calificado" de sus hijos Brian (6) y Rocío (4), y el "homicidio simple" de su pareja, Lilian Fuño Rodríguez (26), delitos por los que podría ser condenado a prisión perpetua.

Fuentes judiciales informaron a Télam que el Tribunal Oral Criminal (TOC) 4 de Morón, integrado por los jueces Carlos Torti, Rodolfo Castañares y Pedro Rodríguez, dará a conocer el veredicto a las 11.

En la etapa de alegatos, los fiscales Hernán Alarcón y Adrián Ferrari, y los abogados querellantes Miguel Racanelli y Damián Pérez, solicitaron para Cajal la pena de prisión perpetua.

En sus fundamentos, los fiscales estimaron que el móvil del triple crimen fueron los celos que Cajal sintió al enterarse que su pareja tenía una relación con otro hombre, por lo que sospechaba que el hijo que ella esperaba no era de suyo.

Además, citaron declaraciones de allegados a la mujer que manifestaron que el acusado mantenía una relación "violenta" y "machista" con su familia.

Otros de los puntos tenidos en cuenta por la fiscalía fue el resultado de un peritaje psicológico que determinó que Cajal tenía rasgos de personalidad psicopática, ya que no siente culpa ni angustia por sus actos.

Por su parte, los abogados defensores Rolando Gandolfi y Jorge Macchia pidieron la absolución de Cajal al considerar que no existen pruebas fehacientes que lo involucren en el triple crimen.

Al decir sus "últimas palabras" ante el tribunal, Cajal manifestó que quiere "que se haga justicia" y afirmó que los padres de su mujer asesinada lo acusan sin pruebas.

"Siempre intenté hablar con la familia de mi mujer, me culpan por algo que nunca hice. Quiero que se haga justicia", dijo Cajal.

"Yo amaba a mi familia y no maté a nadie. Si la Justicia no hace justicia, yo voy a hacer justicia con mis propias manos. Yo ya perdí todo porque a mí me mataron a toda mi familia y no tengo nada que perder", agregó el hombre, quien habló por primera vez sobre el hecho desde que fue detenido.

En diálogo con Télam, el abogado Racanelli sostuvo que "todos los testigos, más las pericias expuestas ante el tribunal, dejaron a Cajal en una mala posición" y que "está claro que el asesino de su familia fue él".

En la única declaración que realizó durante el juicio, el imputado aseguró que el 2 de noviembre de 2009 se fue de su casa a las 10 a una obra donde hacía trabajos de pintura y de albañilería, y cuando volvió, cerca de las 18, no pudo entrar porque no tenía las llaves y nadie respondía a la puerta.

El acusado dijo que le pidió permiso a un vecino para saltar desde su propiedad hasta su casa, situada en Valle 540, de Morón, y que, con el hombre de testigo, levantó una persiana para mirar hacia adentro.

En ese momento, recordó, le dijo al vecino: "Llamemos a la policía que algo malo le pasó a mi familia".

En el living de la vivienda estaba el cadáver de su hijo Brian rodeado de cartas de Ben 10; en la cocina, el de su mujer, Lilian, embarazada de ocho meses y medio, y en una habitación de la planta alta, el de su hija menor, Rocío, que estaba tendida en la cama.

Si bien faltaba un equipo de música de la casa, los investigadores siempre descartaron la pista del robo por la forma sorpresiva en la que se cometieron los ataques.

Cajal estuvo preso hasta septiembre de 2010, cuando la Cámara de Apelaciones de Morón le concedió la libertad, situación en la que llegó a juicio oral.