Mató a su marido, lo descuartizó, lo cocinó pero no pudo con la culpa y terminó confesando
Tenían una beba de 8 meses y mató al marido porque, según ella, le robó 5 millones de pesos chilenos para gastarlos en mujeres y alcohol.
Rossana Valdés Caro, una chilena de 34 años confesó ante la justicia haber asesinado a Claudio Muñoz Ramírez, de 43, en la casa que compartían en la localidad de San Hilario, en la Región del Maule, en Chile.
La mujer contó que mató a su pareja de un balazo, lo descuartizó y lo hirvió en una olla después de haber discutido porque creía que él le había robado 5 millones de pesos.
Además, Rossana contó que usó como "guía" una serie de películas y programas policiales. Con esa guía se inspiró en cómo matar y en las posibles formas para deshacerse del cadáver.
Ante los carabineros, Valdés Caro contó que sacó los restos de la olla donde hervían y dejó las extremidades en unas fuentes de plástico hasta que se enfriaron.
Después, la mujer embolsó las partes del cuerpo de su marido, las subió al auto y salió a dar vueltas porque pensaba enterrarlos. Visitó las ciudades de Santa Lucía y Talca pero declaró que no tuvo el valor y volvió a su casa.
Una vez en su casa y aún con los restos de su pareja en el auto, Rossana contó que cambió de ropa a su beba y se fue a la localidad de Pañaflor Viejo a visitar a su familia. La mujer contó que le dijo a su familia que fue sola de visita porque Claudio, cuyo cuerpo estaba desmembrado en el auto, se había ido a cortar leña.
Más tarde la mujer retomó el camino a su casa pero llamó a su hermano y le pidió que, con cualquier excusa, fuera a verla. Allí Rossana le contó lo que había pasado y terminaron confesando todo ante los carabineros.
Fue ante la justicia donde declaró que le cortó las extremidades y la cabeza al cadáver de su esposo y las hirvió porque había visto en películas que así perdían menos sangre.
borradaLa mujer aseguró que lo mató porque él le robó cinco millones de pesos chilenos y los gastó en bebidas y mujeres. Explicó que lo baleó con un arma calibre 38 y que dejó el cuerpo tirado en un sillón para irse a dormir.
Después hizo el trabajo de descuartizamiento y cocción La mujer también contó que su pareja era un hombre violento y esa denuncia fue ratificada por familiares y vecinos, quienes confirmaron que había denuncias desde 2012.
La mujer fue trasladada al Juzgado de Garantías donde ratificó su culpa y dijo haber actuado por miedo. Mientras tanto, la fiscal Mónica Barrientos espera los resultados de la autopsia para imputar a Rossana por parricidio agravado por ensañamiento.
Del otro lado, la defensa encabezada por Carolina Gutiérrez tiene la estrategia clara. Planea defender a Rossana con el argumento de que actuó por la presión de los años de maltratos. Además, asegura que no hubo ensañamiento porque sólo le dio un tiro y no preparó el ocultamiento hasta que su marido no era un cadáver.