Más de 30 años de delitos: los antecedentes del motochorro que arrastró y mató a una psicóloga en Ramos Mejía

Alejandro Miguel Ochoa, el motochorro de 55 años acusado de cometer el robo que le provocó la muerte a la psicóloga social María Rosa Daglio, cuenta con un largo prontuario que incluye causas de más de 30 años. Anoche a última hora, tras ser arrestado, se confirmó que había sido uno de los delincuentes beneficiados para dejar la cárcel bajo la excusa de la pandemia a mediados del año pasado.

Tras una meticulosa investigación llevada a cabo por el fiscal Federico Medone, de la UFI de Homicidios de La Matanza, Ochoa fue capturado por la Policía Bonaerense en su domicilio de la localidad de Castelar. Los efectivos de la Policía de la Provincia de Buenos Aires que participaron del operativo, encontraron en casa de un vecino una moto Gilera YL200 sin patente que coincide con la que se ve en el video del robo que terminó con la muerte de la psicóloga el viernes pasado en Ramos Mejía. El hombre al que le encontraron el rodado reconoció que el acusado le “encajó” la moto en su propiedad “porque siempre viene a descargarme todos los quilombos”. En su captura participó la Comisaría 2° de Ramos Mejía de la Policía Bonaerense y el área de Narcotráfico de la jurisdicción.

Al ser detenido, fuentes del caso revelaron que Ochoa había recibido el año pasado un beneficio para dejar su detención en un penal bonaerense a causa de la pandemia de COVID-19, y que sobre el acusado pesa un prontuario de data desde 1990 con al menos una condena incluida en Mar del Plata: el hombre de 55 años habría empezado a delinquir entre los 24 y 25.

Según registros oficiales, dejó la cárcel en abril de 2020, tras ser beneficiado por la Justicia, con una pena supervisada por el Juzgado de Ejecución Penal N°1 de Mar del Plata: le correspondía salir de prisión con una pena cumplida recién en 2024.

Su historial delictivo, de acuerdo a fuentes policiales, comienza en 1990 cuando fue señalado por tentativa de robo por los Tribunales de Morón. Al año siguiente tuvo una causa por hurto simple, y en 1992 por robo. La siguiente causa en el legajo de reincidencia es por tentativa de robo en el año 1997 en los Tribunales de Mar del Plata. También fue imputado por robo en 2003 en la misma jurisdicción.

Luego fue encarcelado bajo la supervisión de un juzgado de ejecución penal de Mar del Plata, donde también tiene domicilio, acusado por robo agravado ocurrido en 2006. Tras salir, cayó otra vez y fue detenido en una comisaría de Morón, donde tiene causas que datan del 2012 por desobediencia y atentado a la autoridad. Luego regresó al ruedo: tuvo otra causa en 2014.

En esos dos años, según registros, estuvo encerrado en cárceles bonaerenses: tuvo cuatro entradas y salidas a lo largo de su vida.

La historia continúa: en 2017 fue condenado a ocho años y cuatro meses por otros robos cometidos a bordo de su moto a dos mujeres en Mar del Plata, donde una de sus víctimas terminó con fracturas. Los hechos, según el sitio 0223, datan de 2016: Ochoa arrastró a una de sus víctimas por el piso hasta que el brazo de ésta quedó apresado entre la cadena y el piñón de la rueda trasera de la motocicleta. Así, la víctima sufrió fracturas en tres huesos. “Soltá la mochila, hija de puta”, gritaba el motochorro. En el marco de esta pena fue que Ochoa fue excarcelado en 2020 según información oficial que consultó Infobae.

Su extenso prontuario culminaba -hasta el crimen de la psicóloga- con un robo cometido en 2020 que quedó bajo investigación de la Justicia de Morón. Su liberación fue de manera increíble: el motochorro tras ser detenido dio un nombre falso y los investigadores no le encontraron antecedentes, por lo que evitó la cárcel, según el periodista Emmanuel Dalbe. Cuando llegó su identificación a la Justicia, el hombre se había fugado de su casa en Castelar.

Además tendría, al momento de su captura de anoche, otro pedido vigente en su contra originado en Mar del Plata.

En el operativo realizado ayer a última hora participó la Policía Bonaerense con efectivos de la DDI local, el área de Narcotráfico de la jurisdicción y la Comisaría 2° de Ramos Mejía. En su domicilio se encontraron las ropas que habría vestido al momento del ataque a la psicóloga, y en otra casa cercana fue hallado el casco que utilizó en el robo.

Así, fue trasladado a la Comisaría 2° de Ramos Mejía y se espera el comienzo de su indagatoria a cargo de Medone.

Mientras tanto, la autopsia realizada al cuerpo de la víctima lo incrimina severamente. María Rosa Daglio golpeó duramente su cabeza contra la vereda cuando intentó retener sus pertenencias. Fue trasladada de urgencia al Hospital Haedo donde luego de unas horas se confirmaría su muerte. En la autopsia realizada en la Morgue Judicial de Morón se reveló que la psicóloga murió a causa de los golpes recibidos. En efecto, se trató de un paro cardiorrespiratorio de naturaleza traumática. La autopsia indicó la existencia de costillas rotas y lesiones en el bazo.

De esta forma, el motochorro fue imputado por el delito de homicidio en ocasión de robo.