Martínez no se resigna: "Sólo pido Justicia"

Sergio Martínez vive un fin de año especial. Es que, además de ser considerado como uno de los cinco mejores pugilistas a nivel mundial, acaba de romper su relación con el Consejo Mundial de Boxeo (CMB) ya que faltaron a la palabra de darle la chance de combatir ante el mexicano Julio César Chávez Jr., en busca del cinturón mediano regular. Maravilla dialogó a solas con Crónica y le "tiró con munición gruesa" al mexicano José Sulaimán, presidente de la institución.

-¿Cómo es que rompiste relaciones con el Consejo...?

-Me fallaron. Hubo una mentira, me mintieron, me engañaron... Me sentí dolido, es por eso que me bajo de esto, del Consejo. Hasta que no cumplan con lo que prometieron no voy a volver con ellos. Ojalá que lo hagan, para darle credibilidad al boxeo. Cuando ellos aprobaron por unanimidad que iba a combatir con Chávez Jr., ahí dije que no gano yo, sino el boxeo lo hace con limpieza. Gana credibilidad y eso, hoy, lo perdieron.

-¿Por qué creés que lo hicieron?

-Tan sólo para favorecer a Chávez. Nada más que por eso. Me tocó a mí, pero le pudo haber tocado a otro.

-¿Por qué crees que "Junior" no te quiere enfrentar?

-Porque me tiene miedo. Sabe que le gano por nocaut, que le voy a pegar como nunca nadie le pegó, lo voy a lastimar y sabe que lo puedo retirar del boxeo.

-¿Y con Pacquiao o Mayweather?

-(Manny) Pacquiao está súper protegido por Bob Arum, es vergonzoso el manejo que está haciendo. Es una forma muy patética de manejarlo. No se enfrenta a nadie hace años, no se mide con alguien ranqueado, exceptuando a Márquez, que todos sabemos lo que pasó cuando se enfrentaron, le robaron la pelea. Pacquiao me pidió 68 kilos, le dije que sí. Ahora me pide 67 kilos, 66,500... di ese peso cuando tenía 14 años. No, ese peso es imposible. Pacquiao conmigo no quiere, Bob Arum no quiere que le termine el negocio y la mentira de Pacquiao.

(Floyd) Mayweatther tiene problemas, está preso ahora por haberle pegado cobardemente a su mujer. Un tipo tan problemático como él hay pocos. Ojalá salga y ojalá acepte pelear conmigo. No tengo dudas que es el mejor boxeador que hay, pero abajo del ring es todo lo contrario.

-Para 2012...

-La pelea de marzo y después, más adelante, no sabría decirte porque no tengo la más remota idea. No sé si el Consejo querrá limpiar su imagen... Espero que se reivindiquen y me den el duelo con Chávez. Ojalá que hagan las cosas como corresponde. No pido favoritismos, sólo pido justicia. Que se dejen de mentiras y de engaños. Sólo justicia. Si hacen las cosas justas, el campeón va a ser el mejor. No Julio César Chávez Jr., que es un cobarde, una gallina, un mentiroso... un engaño y una falta de respeto para todos los otros campeones del mundo, hacia el público, hacia los propios mexicanos. El les dice que es campeón mundial y no lo es. Ojalá que el Consejo limpie su imagen. Ellos son los que pueden. Después de (Matthew) Macklin, ojalá que el Consejo haga algo y tenga otra vez la oportunidad de ir por el cinturón de la entidad más importante del mundo. Sino lo hacen, va a ser muy difícil confiar en otra cosa después.

-Hoy a la 0 se levanta la copa, se brinda y se piden tres deseos... ¿cuáles serán?

-Quiero el cinturón. Me da lo mismo el rival, sea Chávez, (Marco Antonio) Rubio... cualquiera. Quiero recuperar el cinturón. Como segundo deseo que el Consejo limpie su imagen porque quiero confiar en ellos, confiar en Sulaimán. Y el tercero es una pelea con Mayweather, espero que realmente se me dé la oportunidad... No sé si el año próximo o en 2013.

Sueños a cumplir

Cuando muchos boxeadores y deportistas a los 36 años están pensando en retirarse, Sergio Martínez tiene "mucha cuerda" para cumplir tres sueños que le restan en el pugilismo: combatir en el Madison Square Garden, en el Luna Park y en Las Vegas.

En el primero de los casos, Maravilla podrá cumplirlo el próximo 17 de marzo, cuando se mida en el mítico estadio neoyorquino con Matthew Macklin. "Es un sueño poder pelear en el Madison Square Garden porque es de los pocos sitios donde me falta pelear. Voy a ser parte de la leyenda, el mito, la historia del boxeo que es el Madison Square Garden. Es lo más legendario posible. Estoy muy feliz. Espero tomarlo con la tranquilidad que tomo siempre los enfrentamientos", explicó el pugilista en diálogo exclusivo con Crónica.

Desde 2002, cuando se enfrentó en la Federación Argentina de Box a Francisco Antonio Mora, a quien derrotó en una decisión unánime y retuvo la corona welter, que Martínez no combate en el país. Es por eso uno de sus deseos antes de culminar su gloriosa carrera es decir presente en Corrientes y Bouchard.

"Me encantaría en el Luna Park. Es un sueño que tengo, como en el Madison Square Garden.

Tengo varias cosas pendientes que me siguen motivando. Si no estoy motivado no puedo seguir combatiendo. Combatir en el Madison, estar en el Luna Park... y después quiero triunfar en Las Vegas. Combatí dos veces, una perdí y la otra peleé a cuatro rounds a las tres de la tarde, eso es ‘fracasar’. Quiero ir a Las Vegas, entrar por la puerta grande y salir por una puerta mucho más grande todavía. Esas tres cosas las tengo pendientes. Ojalá que no me vaya del boxeo hasta que las pueda cumplir. Creo que me queda cuerda, el físico está bien, acabo de reparar unas lesiones que eran delicadas, pero estoy bien y eso me da fuerza para conseguir los objetivos de estar en esos lugares", finalizó.

"El Olimpia y los Firpo son un reconocimiento que estaba buscando"

Las manos no le alcanzaban en la noche del jueves a Sergio Martínez para tener todos los premios que había conseguido en los últimos quince días. Maravilla fue seleccionado como el mejor boxeador nacional en los Olimpia y por los Firpo, en el que también se quedó con la estatuilla de oro.

"Llegó la hora del reconocimiento. Estoy agradecido, muy feliz, muy contento. Es un reconocimiento que estaba buscando. La manera que tengo de conseguirlo es trabajando para recoger los frutos que uno siembra. Valió la pena haber trabajado tanto, haber estado lejos de tu país y cuando llegas aquí para un premio y que la entrega se postergue un tiempo porque uno no puede estar... eso es algo muy fuerte, muy importante para mí. Estoy agradecido por haber echo todo lo que hice y tener este tipo de retribución", manifestó el quilmeño.

La popularidad en la Argentina es algo que creció mucho en los últimos años. Antes podía caminar tranquilo por la calle, que eran muy pocos los que lo saludaban. Hoy en día, al ser uno de los mejores pugilistas mundiales, casi que no puede estar en la vía pública.

"La verdad que es algo raro para mí. No estaba acostumbrado a eso. Ahora, cada tres o cuatro personas, la mitad me conoce. Esta bien. Eso es gracias a los medios que difundieron mi imagen y soy más mediático. Hacer las cosas bien produce que todo se vaya acercando... todos los medios. Especializados o no, se van acercando a mí y eso es importante", sentenció Martínez.