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Martina, la gran ganadora de Pasapalabra: "Recibí un cariño que no me esperaba"

La editora fue furor en las redes y asegura que tras la emoción le "dio un poco de vergüenza, pero después me morí de risa".

Martina Barraza completo el famoso "Rosco" de Pasapalabra. La palabra fue "suspicaz". "No me la olvido más, es para tatuársela", bromeó la joven editora de 22 años que no solo se llevó el premio máximo (más de un millón de pesos), sino un apoyo impresionante de la gente.

"Todavía no entiendo nada. Hubo mucha repercusión, el teléfono no paraba de sonar y recibí mucha buena onda en las redes sociales", contó la diez veces campeona del ciclo de El Trece, segura de que la energía positiva del público ayudó a que pudiera completar el juego: "El segundo día que estuve me faltó una palabra y desde ahí todo el mundo me escribió todos los días haciendo fuerza para que ganara. ¡Finalmente me llegó!".

Su paso por el programa impactó a los espectadores y hasta al mismísimo Iván de Pineda, que encariñado con la participante, cada vez que ella estaba cerca de ganar, le pedía que no le rompiera el corazón: "Era genuino, él se mostraba así en el aire y fuera del aire. Mi contrincante de ayer también era una divina y fue una de las primeras que me escribió cuando salió el programa. Detrás de cámaras estaban todos nerviosos".


Sobre por qué cree que la gente (tanto del programa como el público a través de las redes) se identificó tanto con ella, dice que no sabe, que tal vez colaboró el hecho de que es muy joven, pero que aún así no lo esperaba y calificó la repercusión como una "locura".

La grabación de la edición de Pasapalabra en la que se consagró como ganadora fue el lunes pasado, por lo que Martu, como cariñosamente la llamaba el conductor, tuvo que guardar el secreto por varios días y solo se lo pudo contar a su familia más cercana.

Ayer, en su casa, todos reunidos del otro lado de la pantalla, miraron el programa con los mismos nervios y la misma emoción que si estuviera en vivo: "Lo vivimos súper excitados, todos lloraban y la gente me mandaba las respuestas del Rosco a través de las redes".

Aunque admite que el juego "desde el sillón es más fácil", estar tranquila al momento de responder fue la clave que le permitió ganar. Claro que al decir la última palabra, con diez segundos a su favor, no pudo evitar emocionarse y llorar: "Me dio un poco de vergüenza, pero después me morí de risa".

Su hermano fue quien la incitó para anotarse en la competencia luego de ver que en cada emisión del programa de De Pineda ella jugaba frente al televisor: "Después se sumaron mi papá y su esposa para insistirme, así que tuve que decir que sí". Varias veces estuvo cerca de ganar, pero eso no la detuvo: "No me amargaba porque es muy difícil, el Rosco salió una sola vez".

¿Quién es Martina?

La joven de 22 años estudió Edición en la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA y trabaja como editora de libros. Su profesión sin dudas la ayudó para poder adquirir vocabulario, fundamental para completar la rueda de letras: "Siempre me gustó leer. Me recibí el año pasado. Es lo mío, es estar en la fábrica y en el detrás de escena de los libros", contó en una entrevista a Teleshow.

"Aguante Racing", fue lo único que atinó a decir apenas ganó. Es que La Academia es su otra pasión: "Voy siempre a la cancha y soy socia desde pequeña". ¿La sensación de ganar el Rosco, fue parecida a la de ver a su equipo campeón en el 2014? "Como Racing campeón no hay nada, pero son momentos de euforia".

Además, le gusta bailar tango, incluso estuvo en un ballet infantil desde los 6 a los 16 años. Aunque entre el trabajo y las ocupaciones diarias no puede dedicarle al ritmo del 2×4 todo el tiempo que quisiera, siempre está como su pasatiempo.

Ahora, a Martina le queda disfrutar no solo de su merecido premio, con el que ayudará a su familia, sino del cariño que le brindó el público desde su primera aparición televisiva.