María Soledad Fernández, una joven llena de emprendimientos
La hija de Tití trabajaba como diseñadora y tenía su propio local de ropa llamado Rompiendo Espejos.
María Soledad Fernández, la hija de Tití, falleció en un accidente de tránsito mientras disfrutaba Mundial de Brasil. La joven se dirigía de San Pablo a Belo Horizonte, tras el partido de Argentina frente a Suiza por los octavos de final.
La joven tenía 26 años y había ido a Brasil a ver los partidos de la Selección y acompañar a su padre. "Festejando mi cumple con mi hija Sole, que se apareció de sorpresa en Belo Horizonte", había escrito Tití en su cuenta de Twitter junto a una foto de ellos dos.
Ella trabajaba como diseñadora. Tenía una casa de ropa llamada Rompiendo Espejos. A través de las cuentas de las redes sociales del local aprovechaba para subir imágenes de su viaje a Brasil y comunicarse con sus seguidores.
Hace pocos días había agradecido por los 16.000 "Me gusta" en la página de Facebook del local y se mostraba constantemente orgullosa de los logros de su emprendimiento.
"Mucho amor y rocanrol. La paz por ahora te la debemos", reza la página de Instagram del local.