Manchas de sangre complican al novio de la chica desaparecida

Con el hallazgo de manchas de sangre en el interior del domicilio de Daniel Lagostena, el novio de Erica Soriano, la joven de 30 años que está desaparecida desde el 21 de agosto pasado; se complicó la situación procesal de Lagostena, que desde hace 48 horas está desaparecido.

Según la investigación, y luego de varios allanamientos, fueron encontradas manchas de sangre en el interior del domicilio de Lagostena y en el coche que le dejó a su padre.

Lagostena, quien desapareció de su domicilio el domingo pasado dejando una nota que decía que no quería ser el "chivo expiatorio" del caso, es el sospechoso favorito de la familia de Erica. 

Desde que se supo que la chica no había llegado a la casa de su madre, su familia responsabilizó a Daniel, a quien además le recriminaron su falta de compromiso en la búsqueda de su pareja.

Lagostena declaró que el sábado 21 de agosto discutió con su pareja por un mensaje de texto que había encontrado en su teléfono celular, y amplió que después de la pelea ella le dijo que se iría a la casa de su madre, en la localidad de Villa Adelina.

Erica salió de su domicilio en Lanús con las monedas para el colectivo, pero dejó el teléfono celular y la cartera, algo que desde un primer momento llamó la atención de los investigadores.

En las últimas horas, y a partir de la desaparición anunciada del novio de Erica, los investigadores avanzaron en la pista que apunta a un móvil pasional.

Casi de inmediato la Justicia ordenó allanar su casa, donde realizaron excavaciones que no arrojaron resultados. Sin embargo, dos fuentes de la investigación confirmaron que peritos de la Policía Científica encontraron manchas hemáticas que serán peritadas.

Los mismos voceros destacaron que también levantaron aparentes muestras de sangre en el Peugeot 207 que Lagostena le dejó a su padre, poco después de anunciar su desaparición.