Mala praxis en San Juan: murió una chica de 18 años luego de una operación de amígdalas

Después de 25 días de agonía, murió Julieta Viñales, la joven de 18 años que estaba internada en grave estado en San Juan tras someterse a una operación de amígdalas. En medio del dolor, su mamá denunció al médico que realizó la intervención por mala praxis y afirmó: "Voy por todo contra él”.

"Vuela alto mi angelito, vuela alto que en algún momento mamá va a estar con vos...". Así empieza el doloroso mensaje que Cyntia Aboal, la mamá de Julieta, publicó en la red social Facebook. "Yo confiaba plenamente en que ibas a ser un milagro y que nuevamente ibas a estar con nosotros, pero Dios te quiso junto a él y por algo será. Ahora no encuentro explicación a todo esto, solo te pido perdón por no haberme dado cuenta del daño que te habían hecho".

Tras la muerte de Julieta, el profesional que la operó quedó en la mira. La familia de la adolescente lo denunció por mala praxis y lesiones graves y destacó además que el médico "se borró" cuando el cuadro de salud de su paciente empeoró. Nunca, desde que la joven sufrió la primera hemorragia, pudieron volver a contactarlo.

“La condena social es lo mejor que le puede pasar. A nosotros nos destrozó, pero voy por todo contra él”, expresó Aboal en diálogo con sanjuan8.com. Ahora, la carátula por lesiones graves se convirtió en "homicidio culposo por mala praxis", un delito por el que podría recibir una pena de tres a seis años de prisión.

Mientras avanza la investigación, la defensa del profesional que operó a Julieta presentó la eximición de prisión y el juez a cargo de la causa, Matías Parrón, no descartó que se investigue a más personas.

Si bien, la autopsia determinará qué fue lo que ocurrió con la víctima y si efectivamente el médico le perforó la carótida en la intervención, hay indicios de que la descompensación y posterior coma de la joven se produjo por negligencias médicas. En ese sentido, el magistrado explicó que analizará las tres historias clínicas de la joven, ya que fue atendida en un sanatorio privado y dos hospitales públicos.