El presidente de Venezuela,
Nicolás Maduro, salió en busca de un gurú para poder dialogar con la oposición. El lunes recibió en el Palacio de Miraflores al famoso líder espiritual indio Sri Sri Ravi Shankar, fundador de la organización humanitaria "El Arte de Vivir".
"Agradecido y complacido con la visita del Líder Humanitario y Embajador de la Paz Gurudev Sri Sri Ravi Shankar. Hombre de gran experiencia como mediador en la solución de conflictos en varios países del mundo. Sus aportes vienen a fortalecer el proceso de diálogo y paz", tuiteó el mandatario tras el encuentro.
"Un encuentro muy bonito"
Maduro indicó que Ravi Shankar, conocido por sus cursos de respiración y desarrollo personal, ayudará con el diálogo que mantiene con la oposición venezolana en Barbados para tratar de solucionar la grave crisis económica y política que sufre el país.
"He tenido un encuentro muy bonito, muy aleccionador con Sri Ravi Shankar, hablando de la paz, de la humanidad, de la fuerza de Dios", declaró el líder chavista en otro video que difundió en su cuenta de Twitter.
Shankar ayudará "con su capacidad de mediación a encontrarnos, reencontrarnos, a tomar el camino de la unión nacional", insistió.
La noticia no fue tan bien recibida por la oposición. Juan Guaidó, el titular del Parlamento reconocido por más de 50 países como presidente interino de Venezuela, dijo que "no confía en ese elemento", en diálogo con la radio Blu de Colombia.
"Es una burla adicional", denunció en TN el dirigente opositor Fabio Valentini. Maduro "quiere dar al mundo una visión del país que no es", agregó.
En 2015, Ravi Shankar participó a las negociaciones que llevaba a cabo el gobierno de Juan Manuel Santos y las FARC en La Habana y llevó a cabo una meditación guiada con los líderes de la guerrilla.
El gurú incluso asistió la firma del acuerdo de paz entre el Gobierno colombiano y la guerrilla en el Teatro Colón de Bogotá el 24 de noviembre de 2016.
El Arte de vivir afirma que Shankar también intervino en conflictos en Irak, Costa de Marfil, Cachemira y Bihar.
Según la página oficial de la ONG, Shankar desea crear una "sociedad libre de estrés y de violencia" y para eso desarrolló programas para "empoderar, equipar y transformar a las personas para enfrentar los desafíos a nivel global, nacional, comunitario e individual" que afirma siguieron más de 370 millones de beneficiarios en 156 países.
El gurú indio fue reconocido como una de las personas más influyentes de la India por la revista Forbes en 2010 y suele recibir críticas por los altos costos de sus formaciones que le permitieron crear un complejo de 40 hectáreas en la ciudad de Bangalore.
En la Argentina, es principalmente conocido por su relación con el presidente Mauricio Macri, que lo invitó para un evento de meditación masiva en Palermo den 2012 cuando era jefe de Gobierno porteño.
La noticia de la llegada del gurú a Caracas no sorprendió tanto a los venezolanos. Maduro y su esposa Cilia Flores son conocidos por su interés en la espiritualidad oriental y ser seguidores de Sathya Sai Baba, con el que se reunieron en 2005. En 2013 se informó que había recibido la "bendición" del movimiento creado por el polémico gurú hindú para suceder a Hugo Chávez.
"Llegó la hora de que los venezolanos se pongan de acuerdo"
Maduro calificó como "bastante auspiciosos" los resultados de la primera jornada de la tercera ronda del diálogo entre su administración y el gobierno interino designado por el parlamento, y subrayó que llegó "la hora" de que los venezolanos se pongan "de acuerdo".
"Ha arrancado el proceso de diálogo con la oposición venezolana", señaló el mandatario, quien explicó que en las conversaciones se aborda "integralmente una agenda" de seis puntos, que incluye temas políticos, sociales y económicos, entre otros.
Llamó a los opositores al chavismo a que "no se dejen engañar" sobre la agenda del diálogo, aunque sostuvo: "En los temas de la oposición no me meto".
"Estoy seguro de que van a ir saliendo acuerdos parciales para beneficio de Venezuela, siempre y cuando se trabaje con buena voluntad y si no hay intervencionismo de Estados Unidos para dañar esa mesa", expresó Maduro, quien subrayó que él y sus colaboradores fueron "tercos en la búsqueda del diálogo con la oposición desde el año 2014".
"Ha llegado la hora de ponernos de acuerdo; en el diálogo todas las partes tienen que sentarse y estar dispuestos a ceder posiciones", recalcó.