Macri, espiador serial

El ex Presidente fue llamado a prestar declaración indagatoria, ya que la Justicia sospecha que mandó a espiar a los familiares y abogados de los 44 desaparecidos en el trágicamente siniestrado submarino.

En junio del año pasado, los familiares de los mártires del submarino se presentaron en la Justicia para pedir que se investigue si el gobierno de Cambiemos los mando a espiar ya que tenían la certeza que sus teléfonos fueron intervenidos. Los mismos empezaron a sospechar de la cúpula de Armada cuando advirtieron que sus teléfonos comenzaron a funcionar mal en las inmediaciones de la Base de Mar del Plata. En esta causa, se imputa y se le impide salir del país a Macri.  

El juez cuenta con fotos de seguimientos a los abogados Tagliapietra y Carreras, como así también a los familiares cuando manifestaban tratando de saber algo de sus seres queridos. Dos de ellas, Daniela Ávila y Marta Vallejos, sostienen que el ministro de Defensa Oscar Aguad, se adelantaba o adivinaba sus preguntas. Sin duda alguna el funcionario, que no posee dotes de adivinación, simplemente se nutría de escuchas ilegales. ¡Una joyita! No solamente mentían descaradamente en relación al submarino perdido, sino también querían influir sobre las desconsoladas víctimas.

Nótese a esta altura de esta crónica, la tamaña obsesión que presenta Macri, que, desde sus épocas de Jefe de Gobierno de la Ciudad, en donde mando a espiar a las familiares de las víctimas de AMIA. Yo entiendo que los gobiernos deben contar con información, pero de esto a mandar a espiar ilegalmente a inocentes con el solo objeto de saber en qué andan, me hace acordar a lo que se hacía en la dictadura: "veamos en qué andan, porque algo irán a hacer".

Es una constante en Macri el espionaje ilegal, y vaya a saber a cuántas personas más mando a espiar, pero sin dudas los familiares de las víctimas del submarino, sólo querían saber que había pasado con sus deudos. Los políticos, sólo evitar el inevitable escándalo. Según las víctimas, cualquier funcionario que los recibiera, de antemano, conocía que les iban a preguntar o reclamar. 

Es bueno recordar que la Justicia tiene probado el estado calamitoso en que se encontraba el submarino y señaló al respecto: “La unidad submarina ARA San Juan, no cumplía con los planes de mantenimiento programados y que presentaba novedades que comprometían la seguridad en la navegación, con acreditadas condiciones en cuanto a su estado de alistamiento y mantenimiento que eran conocidas por las personas que tenían el poder de mando sobre la misma". Más clarito, imposible.

No solamente sabían que el submarino no debía navegar, sino que también querían saber que harían los familiares. 

Ciertamente hay actitudes de las personas que ofenden la condición humana, y sin dudas Mauricio Macri cuenta con muchas de ellas...