Macri aceptó la renuncia de Oyarbide: un cómplice más de un juez polémico

Norberto Oyarbide cobró relevancia en la sociedad por ser acusado de proteger a los ex presidentes Néstor y Cristina Kirchner, por portar un anillo valuado en miles de dólares y por el escándalo Spartacus, el petit hotel del Barrio Norte. Mauricio Macri aceptó la renuncia del polémico juez y gracias a ello "zafó" de un juicio político. ¿En dónde quedó el mensaje del Presidente de ir a fondo contra la corrupción? Un guiño que puede costar caro para la confianza.

"Hoy le acepté la renuncia a Norberto Oyarbide como Juez Federal. Lo hago con doble sensación: por un lado tengo el alivio por que damos un paso para mejorar la justicia de nuestro país. Saber que este señor no va a fallar más nos debe dar una gran tranquilidad a todos", dijo Macri en un mensaje que puede significar una perdida en la credibilidad de la palabra.

En la campaña presidencial, Macri afirmó que iba a investigar los casos de corrupción más importantes de nuestro país. "Propongo (...) no prescriptibilidad de los delitos de corrupción", afirmó en "Argentina Debate" el domingo 15 de noviembre. Al conocerse la aceptación de la renuncia del polémico juez queda en claro que el Presidente rompió con las promesas que realizó.

Al no llevar a un juicio político a Oyarbide, Macri no cumplió con su mensaje de investigar a un juez que entre fines de 2009 y comienzos de 2010, sobreseyó en tiempo récord a los Kirchner en la causa de enriquecimiento ilícito tras pocos meses de investigación.

Muchas encuestadoras, políticos y periodistas sostienen que uno de los puntos más fuertes que tiene Macri ante la sociedad es la credibilidad. Con esta decisión pone un alerta.