Luego de siete horas de corte, los gremialistas de ATE levantan el bloqueo en Ezeiza
Trabajadores de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) mantuvieron hoy una protesta en las inmediaciones del Aeropuerto Internacional de Ezeiza en reclamo de aumentos salariales y la reincorporación de empleados cesanteados del área de Migraciones.
La medida fue repudiada por el ministro del Interior, Florencio Randazzo, quien denunció que se trata de "una medida política del sector que responde a Pablo Micheli", el secretario general de ese gremio y líder del sector de la CTA que se opone al Gobierno nacional.
Desde las 12, unos 150 sindicalistas se ubicaron en la autopista Richieri, en el acceso al aeropuerto internacional de Ezeiza, y sumado a la construcción de un puente que se lleva a cabo en el lugar, sólo quedó habilitado un carril, lo que generó durante varias horas una gran congestión de tránsito, con autos circulando a menos de 30 kilómetros por hora.
El delegado del gremio, Hugo Bellón, afirmó que la medida de fuerza responde a que "se pasó a disponibilidad a 80 compañeros, con una reducción salarial de un 30 por ciento" y advirtió que aguardaban abrir una mesa de diálogo "con los ministros Randazzo o (Carlos) Tomada o con alguna autoridad nacional" para atender sus demandas.
Bellón además negó que la Richieri estuviera reducida por la presencia de los manifestantes del gremio y atribuyó ese hecho a las obras de infraestructura que se realizan en ese tramo.
Además el delegado advirtió que si no tiene respuestas del Gobierno nacional, "Micheli convocará la semana próxima a un paro nacional de ATE".
La misma causa fue la que dio origen a un paro de los empleados hace algunos días, que generó trastornos a los pasajeros.
Por su parte, Randazzo señaló que "es una medida política del sector que responde a Pablo Micheli, quien está alineado con la candidatura de Pino Solanas en Capital Federal".
"Estamos frente a una medida irracional e injustificada, porque no hubo un solo despido de empleados de Migraciones que cumplen tareas en el Aeropuerto de Ezeiza", se quejó Randazzo.
En ese sentido, el ministro opinó que los delegados de ATE "están en todo su derecho de apoyar al candidato que quieran", pero deberían hacerlo "sin poner de rehenes a los ciudadanos con una medida de fuerza que no tiene ningún justificativo".
Desde las 12, unos 150 sindicalistas se ubicaron en la autopista Richieri, en el acceso al aeropuerto internacional de Ezeiza, y sumado a la construcción de un puente que se lleva a cabo en el lugar, sólo quedó habilitado un carril, lo que generó durante varias horas una gran congestión de tránsito, con autos circulando a menos de 30 kilómetros por hora.
El delegado del gremio, Hugo Bellón, afirmó que la medida de fuerza responde a que "se pasó a disponibilidad a 80 compañeros, con una reducción salarial de un 30 por ciento" y advirtió que aguardaban abrir una mesa de diálogo "con los ministros Randazzo o (Carlos) Tomada o con alguna autoridad nacional" para atender sus demandas.
Bellón además negó que la Richieri estuviera reducida por la presencia de los manifestantes del gremio y atribuyó ese hecho a las obras de infraestructura que se realizan en ese tramo.
Además el delegado advirtió que si no tiene respuestas del Gobierno nacional, "Micheli convocará la semana próxima a un paro nacional de ATE".
La misma causa fue la que dio origen a un paro de los empleados hace algunos días, que generó trastornos a los pasajeros.
Por su parte, Randazzo señaló que "es una medida política del sector que responde a Pablo Micheli, quien está alineado con la candidatura de Pino Solanas en Capital Federal".
"Estamos frente a una medida irracional e injustificada, porque no hubo un solo despido de empleados de Migraciones que cumplen tareas en el Aeropuerto de Ezeiza", se quejó Randazzo.
En ese sentido, el ministro opinó que los delegados de ATE "están en todo su derecho de apoyar al candidato que quieran", pero deberían hacerlo "sin poner de rehenes a los ciudadanos con una medida de fuerza que no tiene ningún justificativo".