Los verdaderos motivos por los que se separaron Marcelo Tinelli y Guillermina Valdés
Según cuentan no existieron terceros de ninguna especie y tampoco malos vínculos entre Guillermina y las hijas de Marcelo.
El verdadero motivo de la separación de Marcelo Tinelli con Guillermina Valdés es uno solo y se llama precisamente: Marcelo Tinelli.
"Marcelo está casado únicamente con Marcelo", asevera una persona relacionada a Tinelli en el diario Crónica. "Es un gran tipo en todo sentido y un excelente padre pero está 'casado' únicamente con él. Se hace difícil poder llevar algún estilo de convivencia, tener tiempo libre compartido, elaborar proyectos desde la unión de dos personas, diagramas salidas puntuales, vacaciones elaboradas con mucha antelación. Todo es así y no hay manera de cambiar este cuadro de situación. El poder, que también existe como forma de liderazgo en una sociedad de fomento, Marcelo lo tiene y quiere llevar adelante muchísimas cosas y se pone plazos y todo el día lo destina a esta circunstancia. Es imposible modificar su estilo, su personalidad".
"En este momento Marcelo está obsesionado con llegar a la presidencia de la AFA. En Europa está actualmente porque quiere incrementar relaciones importantes y avales a nivel institucional de la FIFA para que apoye (o allane el camino sin ningún tipo de obstáculos) a esta institución. De la misma manera, si podría, en tiempo cercano, llegar a la presidencia de la Nación, no tengas ninguna duda que lo haría", aseguró un allegado a Tinelli.
Inevitablemente, la relación con Guillermina Valdés llegó a su punto de crisis terminal porque la pareja, en todo su universo no contaba con los mínimos espacios de saludable y necesaria convivencia.
Según cuentan no existieron terceros de ninguna especie (Sol Calabró o Andrea Burstein). Tampoco malos vínculos entre Guillermina y las hijas de Marcelo. Marcelo vive para él y sus proyectos todo el día, las 24 horas. Su vida personal, privada, su relación de pareja, lamentablemente, no tiene cabida en su estructura existencial de ahora, de ayer y de los tiempos que se vienen.
Guillermina y Marcelo se conocieron cuando ella era la mujer de su ex amigo y colega, Sebastián Ortega, y él estaba casado con Paula Robles, pero no fue sino hasta dos años y medio atrás, cuando, los dos separados, decidieron darle una nueva oportunidad al amor. Fruto de ese romance, el 18 de abril de 2014 nació Lorenzo, quinto hijo de Marcelo y el cuarto de Guillermina, formando una familia compuesta muy numerosa.