Los radicales seguirán en Cambiemos, pero reclamarán ampliar la coalición
En la previa al encuentro, los dirigentes unificaron los documentos y hay principio de acuerdo.
Hoy es un día clave tanto para el radicalismo como para la alianza oficialista Cambiemos, ya que se desarrollará la Convención del partido centenario que definirá el futuro electoral con vistas a las elecciones presidenciales. Se espera un áspero debate en el que el partido ratifique su pertenencia a la coalición de Gobierno, pero insista en el reclamo de ampliar el espacio tal como lo planteó dos semanas atrás el presidente del partido, el gobernador de Mendoza Alfredo Cornejo.
En la previa, el jefe del interbloque Cambiemos en el Senado Luis Naidenoff adelantó cuál será el resultado de la cumbre. "Saldrá la ratificación plena de Cambiemos, que no se rompe. En todo caso habrá una ampliación otras fuerzas", explicó el legislador. El encuentro se hará en Parque Norte, participarán 327 convencionales de todo el país y tiene lugar a menos de un mes de la presentación de las listas de precandidatos.
El partido llega a la reunión del máximo órgano partidario en un clima de tensión interna, que aumentó justamente con la filtración del borrador elaborado por Cornejo titulado "Una nueva coalición de gobierno para construir una Argentina sana y previsible", al que tuvo acceso TN.com.ar. En el documento preliminar los dirigentes reclaman que el frente se transforme en una coalición con nuevos actores, reglas escritas y mayor participación de los socios, una queja que desde el centenario partido le hacen desde hace tiempo al PRO.
El documento no cayó bien entre los radicales más cercanos a la Casa Rosada, que armaron un "contradocumento" que también hicieron circular entre los convencionales, en el que defienden la alianza con el PRO y la Coalición Cívica. En ese sector se ubican el vicegobernador bonaerense Daniel Salvador, Jesús Rodríguez y Agustín Campero, vicepresidente de la convención nacional y el diputado nacional Facundo Suárez Lastra, entre otros.
En el contradocumento, los "dialoguistas" confirman la permanencia del radicalismo en el frente que en 2015 llevó a Macri a la Presidencia y llaman a la conformación de un "programa común" que responda a los "principios doctrinarios" del partido. No hacen referencia a la incorporación de nuevos socios a Cambiemos ni abren la posibilidad de definir la fórmula presidencial en una PASO.
Esta posición tendría el respaldo de Ernesto Sanz, Ángel Rozas, José Cano y el de los jefes del interbloque Cambiemos, Mario Negri (Diputados) y Naidenoff (Senado). Del otro lado, el gobernador de Jujuy Gerardo Morales y el histórico operador radical Enrique "Coti" Nosiglia estarían de acuerdo con el documento de Cornejo, cuyos fundamentos económicos contaron con la colaboración de Martín Lousteau.
En contrapartida, se difundió un tercer documento del sector "rebelde" con la firma de unos 70 convencionales, en su mayoría de la ciudad de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y Mendoza, entre ellos el titular de la convención, Jorge Sappia. En ese texto llaman a construir "un nuevo frente electoral y programático para poner a Argentina en el camino del crecimiento".
Integran además este sector Federico Storani, Ricardo Alfonsín y Juan Manuel Casella, que plantean que el formato de Cambiemos está "agotado" e impulsan un frente integrado también por el socialismo, el GEN y sectores del peronismo, y que podría ser liderado por el exministro de Economía Roberto Lavagna.