Los que lucran con la inseguridad
*Por Gerardo Milman. Para que mejoren las condiciones de la seguridad ciudadana se debe actuar de manera consecuente y focalizando con gran energía no sólo en mejorar las condiciones que hacen a la igualdad económica, sino también en desarticular la red de negocios que la propia inseguridad genera.
El modo progresista de mejorar las condiciones de seguridad pasa, en primer lugar, por tener la decisión política de desmantelar cada una de las unidades de negocios que alimentan y sostienen al crimen organizado . Cuando la inseguridad deje de ser una economía subterránea de gran escala, la sociedad estará más segura.
Hay que animarse a acabar con los desarmaderos, la venta ilegal de repuestos y la demanda de autos robados para su reposición; terminar con la venta o alquiler de armas en un mercado negro fabuloso que provee de armas más sofisticadas que las que tiene la policía a cualquiera que se proponga obtenerlas ; desarticular las redes de prostitución, tráfico de niños y trata de personas para terminar con el ejercicio del trabajo esclavo o la "prestación" de servicios sexuales denigrantes.
Hay que erradicar la corrupción policial y crear ámbitos más amigables donde la ciudadanía pueda concurrir a realizar denuncias. En 2010, sólo en la provincia de Buenos Aires, se registraron 211 denuncias diarias por violencia familiar y las propias fuerzas de seguridad reconocen que el 60% de los delitos jamás se denuncia.
No es progresista que los lugares donde se reciben las denuncias sean oficinas intimidatorias; o que haya políticos y sindicalistas involucrados en casos de tráfico internacional de estupefacientes o sospechados de lavado de dinero.
No es progresista preferir el garrote o el gatillo fácil a invertir en educación para el desarrollo social.
La prevención del delito es también una de las políticas activas del progresismo contra la inseguridad. Actuar para impedir la concreción de delitos implica mayor esfuerzo y, seguramente, mayores inversiones en infraestructura ciudadana y campañas de difusión que apunten a una sociedad más segura y sin miedo.