Los nuevos rumbos de Papaleo: prepara mujeres para ser mujer

Carolina Papaleo es una actriz de larga trayectoria en la televisión argentina, sin embargo decidió explorar otras pasiones y estudió para realizar coaching de mujeres. En el libro "Ser mujer es caro", la hija de Irma Roy recopiló monólogos en los cuales ayuda a las chicas a ser mejores.

En una interesante charla con "Chiche" Gelblung, Papaleo explicó su nuevo rumbo: "No sé si las preparo, creo que es un espacio de reflexión. Yo no estoy enseñando a ser mujer, cada una es mujer como puede".

"No uso ninguna herramienta de la psicología para el 'coaching'. Nosotros no compramos ninguna historia, yo lo que tengo que escuchar es 'dónde estás' y 'dónde querés llegar', y el proceso de transformación tiene que ver con buscar un modelo que sea ideal dentro de las posibilidades", comentó la actriz.

En ese sentido, Papaleo dio un ejemplo: "Las mujeres, cuando se producen, creen que es una elección personal, pero en realidad están respondiendo a un modelo".

Uno de los tópicos que propuso el director de DiarioVeloz fue una de los típicos problemas femeninos, como es no conseguir novio, y la actriz explicó: "Ahí tenemos una creencia fuerte que es el tema de la "media naranja", entonces hay que trabajar si es que la mujer quiere buscar una persona porque cree que está incompleta. El hombre no completa, sino que complementa".

"Yo cuento que una amiga conoce a un chico en un bar. Se dan unos besos y la lleva a la casa. Cuando llega a su casa la lleva a su departamento, y tiene en su habitación tres estantes con ositos. Ella creyó que era sensible. Después tuvieron relaciones sexuales, y al finalizar ella le preguntó: "¿Cómo estuvo?" y el hombre le responde: "Bastante bien, agarrá un osito del segundo estante". Ella había inferido que el hombre era sensible, no que pensaba otra cosa", contó Papaleo.

A su vez, la hija de Irma Roy habló de su experiencia personal con el padre de su hijo, que no lo ve: "El padre de mi hijo desapareció, nunca tuve idea de dónde está. Nunca pregunta por su hijo. En ese momento tenía muchas ganas de tener un hijo, y él me vendió que por mi forma de ser y mi entorno no había tenido un hijo. No creo que lo hizo desde la maldad, sino que desde la simpleza".

Sin embargo, no se preocupa por la ausencia de la figura paterna: "Yo también creo que la necesidad de un padre en la crianza es una creencia".