Los estremecedores detalles del intento de femicidio en Moreno: “Puta, te voy a dar tres tiros”
La hermana de la víctima contó en TN cómo fueron los minutos previos al ataque. Denuncias por violencia de género a escondidas, amenazas e insultos.
El sábado no fue la primera vez que Jessica Fernández sufría una agresión por parte de su pareja y padre de sus dos hijos, pero esta vez la dejó al borde de la muerte. Minutos antes de las 20, Justino Del Valle Ríos apareció armado en la casa de Moreno donde vivía su familia y descargó el cargador de su revólver en el cuerpo de su mujer. “Estaba lúcido y consciente de lo que hacía”, aseguró una hermana de la víctima.
En diálogo con TN, Tania, hermana de la mujer baleada y testigo del dramático episodio, contó que Jéssica había denunciado tres veces por violencia de género a Del Valle Ríos. Pero lo hacía a escondidas, porque tenía miedo que la represalia fuera aún peor para ella. Este fin de semana, sus temores se volvieron ciertos.
“Encontró fotos de las denuncias en el celular de mi hermana”, explicó Tania, que acudió a la casa de Jessica esa noche después de que ella la llamara para contarle lo que había ocurrido. “Te voy a matar a vos, a los chicos y a toda tu familia”, fueron las palabras con las que Del Valle Ríos se retiró tras el descubrimiento que había hecho al revisar el teléfono, y poco después volvió a cumplir con su promesa.
El agresor golpeó la puerta mientras la víctima se encontraba bañando a su hijo en el primer piso de la casa, y cuando ingresó “se fue directamente arriba, le dijo ‘pu... de mie..., te voy a dar tres tiros’”, por lo que Jessica “bajó corriendo” para resguardarse.
“Yo le pedí que agarrara a los chicos y nos fuéramos, pero apenas le dije eso el tipo ya estaba ahí, nos cerró la puerta principal, no podíamos salir”, siguió su relato quebrada por el llanto, y añadió: “Mi hermana empezó a forcejear, él la empuja y ahí le empezó a disparar”. Jéssica ya estaba herida cuando vio al hombre apuntarle a sus hijos, de 3 y 4 años, y se abalanzó sobre ellos para cubrirlos. Así les salvó la vida y cinco balazos en total impactaron en su cuerpo.
En ese momento, angustiada, Tania recordó que ella se desesperó por evitar que Del Valle Ríos le siguiera disparando a su hermana, se interpuso entre los dos y le pidió que la matara a ella en su lugar. “Pero él gatilló y se quedó sin balas”, afirmó. Recién en ese momento fue que escapó del lugar. Para la joven, su cuñado “estaba lúcido, era consciente de lo que hacía” y no parecía estar alcoholizado.
“La Justicia hizo oídos sordos, esperó a que mi hermana estuviera en estas condiciones para moverse, nunca le dieron un botón antipánico, nada”, dijo. A la espera de un milagro para que Jessica sobreviva al brutal ataque, Tania pidió que el ahora prófugo pague por lo que hizo. “Ella luchaba sola con sus hijos contra un asesino”, concluyó.
La víctima está ahora “con una traqueotomía, tiene perforado el abdomen, el pulmón, el corazón, tiene una bala en el hombro y otra en el brazo, tiene cinco balas adentro de su cuerpo y la operación duró seis horas”, agregó ante las cámaras una prima de Jessica, en la puerta del hospital de Moreno donde se encuentra internada. Pero además remarcó que un sexto disparo rozó la cabeza de la mujer e impactó en una heladera.
Intervino en el hecho la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 de Moreno, a cargo de Leandro Ventricelli, quien caratuló el expediente como “tentativa de femicidio agravado por el vínculo” y ordenó una serie de medidas para intentar dar con el acusado.
Dejá tu comentario